Watashi, Nouryoku wa Heikinchi de tte itta yo ne! Volumen 12 parte 2.

 capítulo 89: una batalla defensiva “¡¿pero si hacen algo así de estúpido no van a terminar causando una guerra con alguien más?! aunque derroten temporalmente a esas colonias de demi-humanos—dejando de lado a los otros clanes asentados dentro del país—van a causar que otros demi-humanos vengan desde países circundantes, y quizás también ejércitos humanoides de otras naciones, con la intención de defender los antiguos tratados y prevenir una guerra demi-humana en el continente. además, los dragones antiguos formaron sus propios pactos, y si se enojan… ¡es un suicidio! y aparte, a pesar de todo lo que está pasando aquí, ¿el imperio quería empezar a meterse con el reino de brandel? ¿en qué demonios pensaban?”, gritó mile. sir webdel se encogió de hombros, una mirada de preocupación en su cara. “digo, por lo que he escuchado, parece que los demi- humanos fueron los que empezaron esta particular pelea… y de forma muy reciente. así que, en realidad, este es un cambio de planes de emergencia, por lo que las, em, preparaciones para con los otros países se detuvieron…”. “¡¿qué?!”. estaba claro que sir webdel estaba midiendo sus palabras para evitar decir cosas como “agresivo” o “invasión”. por lo general, eran los humanos los que iban tras asentamientos demi-humanos, en busca de reclamar algunas tierras fértiles o tesoros raros. era poco común que los demás humanoides, los elfos y enanos, se metieran en conflictos de este tipo. quizás debido a que sus índices de natalidad eran demasiado bajos, debido a su longevidad, tenían poco interés en expandir sus territorios y en su lugar priorizaban la  protección de sus asentamientos actuales, lo cual significaba que las guerras no los hacían muy felices que digamos… que los demi-humanos empezaran esfuerzos de guerra era algo prácticamente sin precedentes. sólo ocurría en casos excepcionales, y muy a menudo, resultaba que los humanos eran la causa principal—por obligar a los demi-humanos a tomar acción cuando su gente era esclavizada, sus tesoros robados, o sus compañeros asesinados por invasores. por lo tanto, las miembros de pacto carmesí rápidamente concluyeron que las personas del imperio deben haber cometido crímenes horrendos para incitar la ira de los demi- humanos. al verlas llegar a esta conclusión, sir webdel sacudió su cabeza. “no, digo, ese no parece ser el caso… ¡al menos no esta vez, en serio!”. básicamente había aceptado que a menudo ese era el caso. “hace muy poco, los demi-humanos comenzaron de repente a invadir tierras ajenas a sus territorios y a echar por la fuerza a los humanoides que residían ahí. parece que al menos dejaron que se llevaran consigo sus pertenencias, pero claramente este es un acto de agresión, una violación de los antiguos tratados”. era un poco raro referirse a seres que vivían dentro de los límites del imperio como “invasores”, pero, aunque los demi- humanos residieran dentro de las fronteras imperiales, por derecho, no eran verdaderos ciudadanos del imperio. no tenían obligaciones militares, ni de impuestos, y ni siquiera debían obedecer los edictos del imperador. pero a cambio, tampoco tendrían protección oficial. para ponerlo de forma amable, eran extranjeros que habían construido sus casas ahí. para ponerlo de forma menos amable, eran igual que bestias y monstruos que vivían en los bosques. por lo tanto, aunque aparentemente tenían los mismos  derechos y privilegios que los humanos, no sería una sorpresa que peleas surgieran por la más mínima provocación, gracias a la profunda intolerancia y malicia que quedaba entre ambos grupos. y por supuesto, este era justo el tipo de situación que los líderes políticos podrían tratar de usar a su favor, ya fuera apaciguando el conflicto o empeorándolo… sin saber las motivaciones de ninguno de los grupos relevantes, poco se podía hacer en este punto. o alguien estaba tramando algo, o había habido un muy desafortunado malentendido. aun así, pacto carmesí tenía una idea, particularmente porque sir webdel había nombrado al enemigo no como una tribu de bestias y demonios en particular, sino a la raza demi- humana en general… “no me digan…”. “¿podrá ser…?” “probablemente…”. las cuatro guardaron silencio un momento. “entonces, sir webdel, ¿con qué bienes comercia su tienda exactamente?”, preguntó pauline, cambiando de tema con normalidad. “a decir verdad, yo también vengo de una familia de comerciantes…”. no había razón para que ningún comerciante ocultara a qué tipo de negocios se dedicaba, así que sir webdel respondió la pregunta de pauline con honestidad. sin duda, él pareció casi agradecido por el repentino, por no decir antinatural, cambio de tema, probablemente habiendo empezado a preocuparse de que la conversación estuviera dirigiéndose a terrenos peligrosos.  mile regresó con los niños, para servirles otra ronda de comida. acompañada por algunos de los niños mayores, mavis se alejó una corta distancia, aceptando una vara y su petición de lecciones sobre lucha con espadas. reina se encargó de los niños que querían aprender magia. y pauline siguió hablando con sir webdel sobre sus negocios…  *** “muchísimas gracias por haber aceptado esta solicitud mía. creo que ha sido una buena experiencia para los niños”, dijo sir webdel, bajando su cabeza. “¡muchas gracias por contratarnos!”, respondió pacto carmesí, bajando sus propias cabezas. ya que esta había sido una misión independiente, en lugar de una a través del gremio, no había ningún reporte final qué completar. ellas recibieron su pago por adelantado, así que, su trabajo había terminado. sabiendo cuántos ingredientes raros y sazonadores caros usaban los platillos de mile, sir webdel con timidez había ofrecido compensación adicional, pero mile simplemente rio y se negó a aceptar. aunque sus ingredientes eran raros, eran cosas que había guardado en grandes cantidades al pasar por sus lugares de origen. ya fueran ítems con temporadas breves de cosecha, o absurdamente caros de transportar para personas que vivieran lejos, mile no veía estos objetos como artículos de particular valor. aunque se tratara de sazones, toda especia era resultado de su magia de calor, usando pimienta y semillas de cáñamo y sésamo negro, semillas de amapola, nori, jengibre, y demás, para moderar el nivel de sazón e incrementar la calidad y  profundidad del sabor. el nori era algo que mile había cosechado ella misma durante el viaje de pacto carmesí a una ciudad costera. luego lo había procesado y secado con magia, junto con lechuga marina y kombu. reunir esos ingredientes no tomaba más que un poco de trabajo, así que no eran tan caros. además, tenía tanto guardado que, si sólo pacto carmesí los usaba, tomaría varios siglos antes de que su suministro siquiera empezara a terminarse.  *** “sir webdel estuvo lleno de sorpresas, ¿no creen?”, dijo mavis cuando todas se reagruparon. “¡sí! aunque claramente esto es un secreto a voces…”, agregó pauline. “estoy segura que los demás equipos ya han descubierto al menos lo mismo que él nos dijo”, agregó reina. sin duda, como implicaron las chicas, si ellos no habían descubierto al menos esta información, entonces esos supuestos comerciantes, quienes hablaban con nobles, expertos en espionaje, y agentes locales, deben ser inmensamente incompetentes. “o quizás, esta es información que ellos quieren que otros países sepan. si una guerra contra los demi-humanos ocurre, ellos querrían que otros países supieran que el imperio no es el malo y que fueron los demi-humanos los que rompieron el tratado. además, si no es algo que ellos mismos estén vociferando, sino información que los altos mandos de otros países obtuvieron por cuenta propia… si fuera sólo cuestión de albarnianos hablando mal de los demi-humanos, podría dejarse pasar como rumores infundados, pero si los países descubren esto por medio de sus propios agentes de inteligencia, entonces no pueden argumentar que el imperio inventó todo”, razonó mile en voz alta.  las otras tres asintieron, siguiendo su lógica. “entonces, no es clasificado, y cualquier persona razonablemente informada sabría al respecto… entonces, ¿qué hacemos?”, preguntó reina. las otras tres no tardaron nada en responder. “bueno, por ahora, ¡supongo que deberíamos ir a decirle a nuestros empleadores!”. “cuando escuchen al respecto, probablemente querrán ir de inmediato a recolectar información en esas áreas…”. “así que tendremos que tomar una ruta que nos lleve hacia allá…”. “en cual caso…”. “¡vamos!”. *** cuando los comerciantes escucharon la información de pacto carmesí, corrieron hacia algún sitio con gran apuro, y después, su estancia en la capital se extendió tres días. no estaba claro si estaban usando su tiempo extra para hacer sus propias investigaciones o para encontrarse con otros equipos, pero en todo caso, parecía que fueron capaces de encontrar la locación en cuestión, la cual sir webdel no había podido nombrar. al fin, su nuevo destino fue decidido. se dirigían a las montañas, al sureste de la capital. el imperio en general era muy montañoso, así que, por lo general, no era la gran cosa decir que irían a las montañas. además, había muchísimas montañas al sureste. y este era un lugar donde pocos humanoides vivían, pero las aldeas demi-humanas eran numerosas…  “aparentemente”, explicó pauline, “la tienda del señor webdel, la compañía worrell, y la compañía dilabolt, el negocio que antes era del criminal galadle, habían aceptado trabajos de distribuir provisiones a la escena de la acción”. pauline había aprendido esto durante su conversación con webdel luego de que las demás se separaran. “en otras palabras”, dijo reina, “estaban a cargo de proveer suministros militares. supongo que, si sólo vas a moverte dentro de tu país, es normal usar comerciantes civiles en lugar de unidades militares de transporte. de esa forma, puedes usar ese tiempo para comenzar a preparar unidades de transporte para la siguiente campaña militar real”. aunque la guerra en la tierra moderna podría implicar grandes movimientos de armamento y munición, en el estado actual de este mundo, lo que un soldado de bajo rango llevaba eran provisiones y cosas como flechas o espadas de repuesto. ya que no iban a invadir otro país, estas tropas no requerían las herramientas necesarias para asediar castillos o fortalezas, como arietes, balistas, ganchos, escaleras de soga, y demás. tampoco había necesidad de sacar grandes cantidades de comida de la capital, ya que podían comprarla o requisarla de aldeas cercanas, y no había que preocuparse de que caravanas de suministros llevando provisiones adicionales fueran atacadas por soldados enemigos. asimismo, quedarse dentro de su propio país significaba que las tropas podían contar con fuentes de agua confiables, es decir, con suficiente agua potable. y claramente, ningún bandido se atrevería a atacar una caravana protegida por soldados. de intentarlo, el ejército se movilizaría al día siguiente y aniquilaría a cualquier bandido en el área. pelearse con el ejército, o con los altos mandos de un país, simplemente no tenía sentido.  por ello, la disponibilidad de suministros no era un problema. sin embargo, seguían siendo suministros militares, para ser usados por la milicia—verdaderamente lo más mínimo de lo mínimo en términos de provisiones. no iban a llevar carne de alta calidad o vino añejado, sin importar cuánto lo pudieran apreciar los soldados.  *** en la capital, los “comerciantes” se habían reabastecido, comprando varios artículos de lujo para llenar el espacio en las carretas, las cuales ahora estaban casi vacías. sería extraño que comerciantes viajaran por el imperio sin nada qué vender, y por supuesto, negociar había probado ser una fuente lucrativa de conversaciones e información. todo esto significaba que necesitaban mercancía. la comida para los soldados era suministrada por el ejército, así que no necesitarían provisiones estándar—y de ahí el concentrarse ahora en artículos de lujo, como aguardiente y dulces. sin embargo, estos productos no eran especialmente grandes, dejando más espacio en las carretas a comparación de cuando salieron de la capital de tils. como resultado, las miembros de pacto carmesí fueron capaces de relajarse al dejar la capital y viajar a las montañas. “entonces, ¿qué deberíamos hacer?”, preguntó mile. “¿qué crees que se necesite hacer? si esto procede como siempre, solo tendremos que explicar lo que podamos y dejar las cosas tan ordenadas como sea posible”, dijo reina. “supongo…”. mile no pudo hacer más que hundirse de hombros.  “bueno, podríamos obtener algunos resultados si usamos el nombre de aquel recadero de los dragones antiguos”, ofreció pauline. “oh, cierto”, bromeó mile, “ese tal vende-tiza”. “se llama berdetice”, dijo reina en tono monótono. ella ya estaba acostumbrada a ser la persona seria en el dúo cómico de mile. “aun así, sabemos que no es sólo un dragón el que está a cargo de contactar a cada equipo de investigación en cada ruina alrededor del continente, ¿verdad? sin importar hasta dónde puedan volar o lo amplio de su territorio, no sería muy eficiente…”, pensó mavis. “bueno, aun si es otro dragón antiguo el encargado de este sitio, ¿no es suficiente dejarles saber que nosotras—o mejor dicho, los humanos—sabemos lo que traman? podemos dejarlos hablar todo lo que quieran, y cuando estén satisfechos, se irán sin luchar. además, estoy segura que información sobre nuestro encuentro pasado ha sido compartida con los demás dragones antiguos. probablemente le contaron también a los demonios y gente bestia en el sitio, ¿no creen?”, dijo reina. “supongo…”, respondieron mile y pauline. por un lado, este conflicto entre humanoides y demi- humanos no parecía un gran problema. de hecho, sería incluso favorable para tils si las fuerzas albarnianas acababan con sus propios recursos luchando dentro de su propio país. sir webdel había llamado a esta incursión un cambio de planes de emergencia, el cual había interrumpido algún tipo de preparaciones relacionadas a “otros países”. aunque él había sido ambiguo a propósito, era difícil imaginar que no habían estado preparando alguna especie de invasión.  “¿y si mejor ignoramos todo esto?”, preguntaron mile y mavis, quienes habían llegado a la misma conclusión casi al mismo tiempo. reina y pauline parecían perplejas, pero una vez mile lo explicó, ambas parecieron entender su punto de vista. “ya veo”, dijo reina. “no hemos aceptado una misión para tratar de resolver este conflicto—y si se resuelve, eso sólo aumentaría las probabilidades de una invasión por parte del imperio a nuestros países de origen”. en general, los asuntos internacionales no eran una preocupación para reina, que se había asentado temporalmente en tils y no lo consideraba su país natal. sin embargo, no se sentía bien imaginar al lugar donde vivían las familias de sus amigas, junto con el sinfín de otras personas a las que había conocido, siendo arrastrado a una guerra, y era aún más desagradable pensar que sus propias acciones podrían empeorar innecesariamente las cosas. “entonces, ¿sólo vamos a reunir información y no ayudaremos a resolver el conflicto? ¿eso no solo empeoraría las cosas?”, preguntó pauline. las otras tres guardaron silencio. avivar las llamas de la guerra ciertamente sería ir muy lejos. ellas no habían aceptado ninguna misión así, y hacerlo las convertiría en belicistas. el silencio llegó hasta pauline también. “bueno, no sabemos con seguridad que esto esté conectado a aquellos otros incidentes, y no tiene caso especular al respecto ahora. si pasamos horas pensándolo y llegamos a descubrir que lo que ocurre es algo completamente diferente, será un enorme desperdicio de tiempo y esfuerzo— ¡una gran pérdida para nosotras!”.  “supongo que tienes razón”. escuchando la palabra “pérdida”, pauline fue persuadida. “bueno, ¡entonces dejemos esto a la suerte!”, declaró mavis. “ese es nuestro…”. “¡pacto carmesí!”, completaron las otras tres. *** siete días luego de su partida de la capital, la caravana llegó a la región sureste del imperio. esta era una distancia que, en cualquier otro país, incluso la carreta de transporte más lenta habría cubierto en unos cinco días, pero viajar tomaba mucho más tiempo aquí en el imperio, debido a sus precarios caminos y largas zonas de lodo como resultado del clima lluvioso. a pesar de esto, gracias a tanto la magia como la fuerza de pacto carmesí, las cosas procedieron sin problemas. habría tomado incluso más tiempo para caravanas normales, pero gracias a las habilidades de mile, no pasaron mucho tiempo atascados en el lodo o tratando con ruedas rotas. en esta área, la mayoría de grupos formarían caravanas mucho más grandes para protegerse de monstruos y bandidos. sin embargo, mientras más carretas estuvieran presentes, más ruedas y ejes se romperían, y habría más retrasos. no era como si una carreta pudiera simplemente abandonarse cuando algo saliera mal, así que todos tendrían que detenerse hasta que las reparaciones terminaran. y por supuesto, las condiciones significaban que las carretas se rompían con más frecuencia de lo normal. “los caminos están en mal estado, así que moverse tarda más para las caravanas, lo cual lleva a costos innecesarios. por lo tanto, los precios de los bienes aumentan, y hay más probabilidad de ser atacado, lo cual sube aún más los precios como una forma de control de riesgos… es un círculo vicioso”, dijo pauline, dando la perspectiva de un comerciante.  “pero más importante”, agregó reina, “el imperio es vasto, con varias colinas—y por ser un país pobre sin casi nada de fondos, no hay mucho para dedicarle al mantenimiento de las carreteras nacionales…”. como hija de un vendedor ambulante, quien había viajado en una carreta con su padre desde cuando tenía recuerdos, reina probablemente tenía mucho más conocimiento sobre las carreteras que pauline, quien era la mimada hija de una casa mercante de mediana clase y que jamás había salido de casa antes de volverse cazadora… “¡oh, ahí! ¡ese parece el lugar donde los soldados se están quedando!”, intervino mile, apuntando a un campamento lleno de tiendas para dormir y para suministros que parecía pertenecer a la milicia albarniana. “¡bien, vayamos a ver!”. “¡sí! em, esperen— ¿no deberían ser nuestros clientes los que decidan eso…?”.  *** “¿qué? ¿están vendiendo artículos de lujo? ¡por supuesto, nos interesa! estoy seguro que será una buena forma de aumentar la moral de las tropas. aunque no queremos vernos envueltos en estafas. entonces, ¿tienen aguardiente y bocadillos? ¡dennos los mejores que tengan primero!”. esta era la forma en que las cosas funcionaban con las tropas en las líneas del frente de este mundo. no es que hubiera algo mal en esto—ya que era importante dejar que los soldados descansaran cuando no hubiera peligro al asecho, e incluso en la tierra de la era moderna, había muchos lugares donde podían comprarse artículos de lujo desde la cantina de la base o mientras se encontraban en navíos militares. sin duda, los oficiales de aquí estaban listos para extender su gratitud a los comerciantes por haberse molestado en transportar estos artículos a tan remoto y peligroso lugar…  siempre y cuando los comerciantes no trataran de ganar demasiado dinero con las tropas. por lo tanto, recibieron con facilidad el permiso de los altos mandos, y los comerciantes abrieron su tienda. como antes, eran los otros equipos los encargados de hablar con personas “importantes”. este equipo estaba principalmente a cargo de recolectar rumores locales, y aunque los soldados no eran exactamente personas locales, las tropas terrestres no eran muy diferentes de personas comunes. aunque sus enemigos no eran especialmente numerosos, la fuerza individual de cualquier demonio u hombre bestia superaba por mucho la de cualquier soldado humano. aun si el ejercito creía tener la ventaja numérica y de armamento, era seguro que enfrentarían muchas bajas, y los soldados sabían que existía la posibilidad mucho mayor que cero de volverse una de tales bajas. esto significaba que estos eran hombres que, casi literalmente, no sabían si vivirían para ver el próximo amanecer. dejando de lado la triste realidad, la llegada de los comerciantes fue una agradable sorpresa. encontrar comida apetecible, bebidas, y demás lujos aquí, en un lugar como este, era algo que jamás habrían pensado que fuera posible. además, había dos jovencitas presentes, al igual que dos (aparentemente) niñas, quienes les recordaban a sus propias hermanas e hijas. no cabía duda de que los “comerciantes” podrían hacer unas cuantas ventas y lograr que los hombres hablasen. “¡señor, gracias por trabajar tan duro por las personas de este país!”. “¡sigue esforzándote igual, hermano!”.  la hospitalidad japonesa de las chicas, inculcada en ellas por mile durante su estadía en la posada de lenny, no hacía más que ayudar a su causa. y así, pacto carmesí, quienes habían pedido “ayudar con las ventas”, empezaron a sumar información… *** durante su cena de esa tarde, las cuatro miembros de pacto carmesí analizaron sus descubrimientos. los comerciantes y los conductores escuchaban, mientras cenaban la comida que mile había preparado para el grupo. obviamente, tanto conductores como comerciantes estaban en el mismo bando, así que no importaba que todos escucharan. “ya veo… esto cambia las cosas un poco”. “sí, durante los incidentes previos, habían actuado con más cautela, investigando ruinas en lugares remotos que los humanos no visitaban…”. “lo que sir webdel había escuchado sonaba a una historia exagerada y retorcida, pero resulta que su información era casi exacta”. específicamente, ella se refería al reporte de sir webdel sobre que los demi-humanos habían ocupado de repente tierras que por lo general no habitaban y sobre que habían echado por la fuerza a los humanoides que vivían ahí. esa segunda parte en particular le había sonado falsa a pacto carmesí, pero según lo que escucharon de los soldados, sonaba a que habían sacado conclusiones apresuradas. por supuesto, los soldados creían que estaban haciendo un bien por la seguridad de su país, así que no solo no tenían nada que ocultarle a pacto carmesí, un grupo de civiles, sino que hablaron con bastante libertad con la esperanza de agradar a estas señoritas. los oficiales, asimismo, no tuvieron problemas  para discutir sus operaciones—de hecho, aceptaron con brazos abiertos la oportunidad de asegurarle a las personas que esta era una batalla justa, por el bien de los ciudadanos. estarían más que felices de que estos comerciantes esparcieran la palabra a otros países sobre que esta era una operación defensiva justificada. de hecho, este era probablemente un deber significativo para ellos, uno que causaba un revuelo en sus corazones—en especial al compararlo con operaciones potencialmente más turbias, como invadir tierras vecinas sin previo aviso, o atacar ciudadanos por el bien de promulgar un bloqueo comercial. aunque el riesgo de muerte fuera mucho más alto, para un soldado, esta era una causa significativa, ¡un deber honorable por el que valía la pena apostar la vida! al menos, esta fue la información que llegó a mavis y a pauline, quienes habían hablado con varios soldados de bajo rango, todos quienes habían estado muy dispuestos a hablar con ellas—a veces incluso entrometiéndose en la conversación o golpeándose unos a los otros en los costados. ¿por qué mavis y pauline, específicamente? porque eran las únicas dos que parecían adultas, con… figuras en un rango aceptable. no hacía falta decir que reina y mile estaban menos que felices por esto.   “¿ahora qué?”. “obviamente, avanzamos y vamos a conocer a los demi- humanos”. esta había sido sin duda la intención del grupo desde un principio. habría sido inútil venir hasta acá y hablar sólo con los soldados. los demás equipos habrían recolectado al menos esta  cantidad de información a través de otras fuentes. de hecho, la única razón por la que habían parado aquí, era porque estaban viajando en carreta y no podían salirse del camino, lo cual significaba que inevitablemente tendrían que atravesar el campamento militar. atravesar y meterse a un área enemiga sin detenerse seguramente habría causado que las detuvieran e interrogaran. no querían que los soldados pensaran que eran carretas llevando suministros al enemigo. en todo caso, su plan era aparecerse en el campamento militar, saludar, descubrir lo que los soldados imperiales tenían que decir al respecto, y luego seguir avanzando. las tropas presentes habían sido despachadas sólo para enfrentarse a un enemigo compuesto de unas decenas o cientos de demi-humanos, así que no era una contingencia tan grande. parecía que, de momento, el imperio había enviado sólo estas fuerzas como precaución, por miedo a que este incidente pudiera causar un conflicto aún más grande con los demi-humanos de todo el país—o aun peor, con demi-humanos de otros países, junto con los humanoides que temían el desarrollo de una guerra contra demi-humanos. en este punto, la fuerza de las tropas despachadas aquí era relativamente modesta. como resultado, las miembros de pacto carmesí asumieron que la suya sería una tarea relativamente simple. “¿creen que la información que compartimos sobre los dragones antiguos, demonios, y hombres bestia no ha llegado a los altos mandos de este país?”, preguntó mile. “nadie sería tan estúpido para darle información útil al enemigo a propósito”, respondió reina.  “también cabe la posibilidad de que supieran, pero no lo creyeran, y asumieran que fue algo falsificado o malinterpretado”, agregó mavis. “ah…”. “pero, el gremio—-”, empezó pauline. “el gremio no se mete en política”, interrumpió reina. “aunque trataran de aconsejar, probablemente habría sido tomado como información falsificada viniendo de otro país”. actuar por reportes no verificables que vinieron de territorio enemigo sólo causaría inquietud, en especial si no sabían cómo interpretarlos. y por eso, no era para nada raro que el imperio ignorara esta información por completo. de hecho, había muchos gobiernos que harían lo mismo. por eso, no podía culpárseles por actuar de forma tan irresponsable. “¡bueno, como sea, mañana avanzaremos!”, dijo reina. “¡sí!”, respondieron las otras tres, como siempre. antes de salir de la capital, habían dejado claros sus planes con los comerciantes, quienes, por supuesto, ya habían escuchado del maestro gremial sobre el incidente inicial de los dragones antiguos, donde los dragones habían hecho de mediadores entre los humanos y la gente bestia. con esta información de trasfondo, los comerciantes habían creído en pacto carmesí sin dudarlo cuando las chicas mencionaron que los incidentes podrían estar relacionados. en cualquier caso, su investigación quedó completada tan pronto como hablaron con los soldados imperiales y descubrieron lo que los soldados comunes habrían escuchado de sus superiores. sin embargo, por así decirlo, no estaban en contra de dejar que pacto carmesí hiciera una parada extra de camino a casa.  “bueno, ya es hora de que nos retiremos”. a la mañana siguiente, los comerciantes avisaron a los oficiales que estarían partiendo y comenzaron a subir a sus carretas, pero… “¡esperen! ¡alto, alto, alto, alto, alto!”. justo cuando las carretas iban a comenzar a moverse, un oficial llegó galopando a máxima velocidad, atravesándose frente a ellos con su mano estirada, y con varios soldados siguiéndolo frenéticamente detrás. “¿hacia dónde van? las tierras ocupadas por los demi- humanos están en esa dirección. ¡la capital es hacia el otro lado!”, declaró el oficial, su rostro pálido. “ah, sí. ¿y qué con eso?”, respondió el comerciante tranquilamente. ya que pacto carmesí eran sólo guardias, dejaron que quienes hablaran fueran los comerciantes—ya que sería peculiar que ellas respondieran. “¡¿por qué rayos unos civiles irían a territorio enemigo?!”. “bueno, digo, ellos son enemigos de acuerdo a ustedes, los soldados, pero nosotros no somos enemigos de nadie. no es como si las personas viviendo en esa dirección fueran bandidos. sólo pensábamos tomar el camino largo hacia la costa pasando por estas montañas, para poder conseguir algunas especialidades locales antes de regresar a casa”. el oficial se quedó sin palabras. para ser justos, los demi-humanos no estaban saqueando nada. sólo habían ocupado ciertas áreas, lo cual llevó a la aparición de los soldados, pero en este momento seguían esperando una decisión de los altos mandos, por consideraciones políticas. aun así, los soldados no podían simplemente ignorar a un grupo de civiles que pensaban entrar directo al corazón del  territorio enemigo. en especial cuando estaban acompañados de unas jovencitas… “todo lo que nos queda en el cargamento es la porción para bandidos”, explicó el comerciante líder—refiriéndose al licor y comida extra que habían apartado para apaciguar cualquier ataque de bandidos, quienes se sabía que se ponían furiosos y listos para matar al encontrar carretas vacías. “aunque los demi-humanos nos ataquen y roben el cargamento, no se beneficiarían mucho”. “aun así—yo—”, el hombre seguía pensando cómo responder cuando otro oficial con una insignia de apariencia pretenciosa apareció. “¡¿a qué se debe todo este alboroto tan temprano por la mañana?!”. el soldado discutiendo con los comerciantes debía tener un rango parecido a primer o segundo teniente, pero este hombre claramente era al menos un comandante. “qué están haciéndole a estos amables comerciantes que se molestaron en venir hasta… o-oh, por todos los cielos, ¡¡¡son las doncellas santas!!!”, gritó de repente el hombre, al ver a pacto carmesí. “¿quién es usted?”, preguntaron las cuatro, con sospechas. “s-soy una de las personas a las que salvaron durante aquella desesperada evacuación en el reino de brandel… esperen, ¿quién es esa chica?”, preguntó, mirando a mile. “la burra”, respondieron las otras tres. “ah…”. ciertamente, esa era la única forma en la que se había mostrado en aquella ocasión… ***  “entonces, ¿desean seguir en esa dirección?”. “sí…”. aparentemente, este oficial era uno de los 5,000 hombres que habían estado presentes durante el intento de invasión a ascham. fue una batalla completamente perdida. aunque las bajas imperiales habían sido pocas, la invasión fue un completo fracaso. de hecho, debido a tal estrepitosa derrota, numerosos héroes tuvieron que ser fabricados para levantar la moral de tanto soldados como ciudadanos. notablemente, aunque el ejército había perdido muchos suministros, apenas hubo pérdidas humanas, y por ello, la operación había sido en su lugar glorificada como un escape exitoso, o como la “milagrosa evacuación” de ascham. parecía que este oficial fue uno de aquellos llamados héroes luego de este evento. en ese entonces, él había sido un capitán, pero ahora había recibido una promoción… sin duda, parecía que este hombre había sido proclamado como uno de los tres oficiales cuyas oraciones invocaron a las doncellas santas. (con la mención de esto, las “doncellas santas” no podían sino preguntar “¡¿qué demonios significa eso?!”, a lo cual el oficial no podía sino responder “no lo sé…”). “entonces”, prosiguió el oficial, “si van hacia allá, se enfrentarán a demonios y hombres bestia. si algo llegara a salir mal…”. “estaremos bien. ya sea en el campo de batalla o en las profundidades del infierno, si es por un cliente, ¡estaremos ahí en un parpadeo! así somos nosotras—” “¡la tienda ambulante: hogar de la doncella santa!”. obviamente, no podían decir el nombre de su grupo aquí, así que, en su lugar, dijeron esta alternativa—en esencia, el  mismo nombre que habían usado antes, aunque con algunas ligeras alteraciones para encajar con las circunstancias. “guh…”. ante esta declaración, el oficial no pudo evitar recordar el hecho de que ellos habían sido quienes necesitaron ser rescatados en ascham. luego de titubear por un rato… “¡al menos permitan que yo y algunos de mis hombres las escolten!”. “¡eso será más peligroso! si solo somos nosotros, no seremos más que una pequeña caravana de comerciantes con guardias, de paso por el lugar. si llevamos soldados, ¡pensarán que somos el enemigo!”, protestó mile. “ah…”, dijo el oficial, reflexionando en sus propias palabras. claramente, estaba tan nervioso que no había pensado en esa posibilidad. “por favor, no se preocupen por nosotros”, dijo pauline con una sonrisa. el oficial no pudo hacer más que asentir sin esperanza. “pero… mm-hmm, bueno… en ese caso, les deseo lo mejor, en serio…”. ¡ya no hay problemas! pensaron triunfantes las miembros de pacto carmesí. así, la caravana fue capaz de proceder sin impedimentos. obviamente, que mile hubiera sido visible en su forma fenómeno diosa durante el incidente en ascham no fue mucho problema. los soldados sólo la habían visto por un corto periodo de tiempo, desde la distancia, y desde un ángulo bajo, así que no habían podido ver bien su cara, lo cual significaba que ahora no la reconocían más que como “la burra”. era más que probable que cualquier otro soldado que hubiera estado presente en ese momento la viera de la misma forma.  además, en este mundo, como en américa de nuestro mundo, un burro era el ejemplo por excelencia de un idiota, o mejor dicho, un tonto. en realidad, esto era un poco irrazonable; los burros se parecían mucho a los caballos, y eran rápidos y diligentes. sólo se habían ganado esta reputación porque no eran tan brillantes como los caballos, a pesar de que un caballo no era ni siquiera tan inteligente como un perro… “¡¿por qué yo tengo que ser a la que llamen burra?!”, se quejó mile, pero todas la ignoraron. ella no tenía derecho a quejarse cuando fue ella la que se había vestido así sólo por ese juego de palabras ‘bremen-fremen’… a pesar de que ni una sola persona en el mundo podría entender el chiste. *** las tres carretas avanzaron por la empinada pendiente de la carretera, su velocidad disminuyendo acorde. justo cuando la caravana rodeó un particularmente grande peñasco… “¡deténganse!”. varios hombres bloquearon su camino. sep, aquí vamos… pueden no haber sido bandidos, pero su aparición era igual de esperada. era fácil imaginar varias razones para esta interrupción—ya fuera querer comprobar si ellos no eran espías disfrazados como comerciantes, o buscar soldados ocultos en las carretas, o simplemente desear que los comerciantes les vendieran algo de comida. “¡¿q-qué es lo que sucede?! no somos más que unos humildes comerciantes…”. los comerciantes actuaron a la perfección como viajeros confundidos.  qué grandes actores… o esperen, quizás debería decir: “¡qué aterradores pueden llegar a ser los comerciantes!”. como siempre, la mente de mile se encontraba en las nubes. “¡¿qué hacen aquí?!”. “bueno, somos comerciantes, así que venimos por negocios…”. “em…”. este nombre debe haber sido un poco tonto como para quedarse sin palabras ante una respuesta tan obvia. sin embargo, esto sólo lo detuvo por un momento, antes de que se recuperara. “¡no, a lo que me refiero es que los caminos hacia acá han sido bloqueados por soldados! ¡¿por qué no les sorprende vernos?!”. ciertamente, había soldados estacionados en la carretera, y sin duda, estos hombres tenían características animales… en otras palabras, eran hombres bestia. “esos soldados sólo están buscando gente haciendo cosas ilegales. no tiene nada que ver con nosotros. en todo caso, ¿por qué tendría que sorprendernos ver gente bestia como ustedes? nosotros los comerciantes somos felices de venderle a cualquiera. no podemos permitirnos sorprendernos por cualquier cliente que nos topemos, ¿no crees?”. “em…”. de nuevo, el hombre se sorprendió tanto que se quedó sin palabras. por otro lado, él estaba feliz de saber que había comerciantes que le venderían a la gente bestia sin prejuicios, y quizás incluso estaba formando una buena impresión de ellos, pero esa no era la respuesta que deseaba escuchar justo ahora. “bueno”, dijo por fin. “vamos a inspeccionar las carretas”.  “adelante. aunque ya casi nos hemos quedado sin artículos, así que no hay mucho ahí dentro…”. los hombres bestia miraron dentro de cada carreta y confirmaron lo dicho por los comerciantes. “un montón de pobres y desaliñados ancianos y unas niñas, con carretas casi vacías. bueno, al menos, no hay posibilidad de que sean soldados…”. “¡un momento!  ¡no puedes llamarlos  ‘ancianos’   como  si nada! ¡y el comentario sobre ser desaliñados fue innecesario! ¡¿y cómo que ‘niñas’?!”, gritó reina. los hombres bestia la miraron, pensando que todo eso era irrelevante.    “una pregunta, ¿podrían vendernos lo que les queda de aguardiente?”. estos hombres aparentemente no tenían idea de lo que era una ‘porción para bandidos’. aunque, por supuesto, así pasaba con la mayoría de gente. esta era una práctica tácita conocida sólo por comerciantes y bandidos. también era verdad que era poco probable que fueran atacados por bandidos en la carretera entre aquí y la siguiente ciudad. y aunque fueran atacados, siempre y cuando pacto carmesí estuviera presente, no había de qué preocuparse. por todas estas razones, en realidad no había razón para preparar una porción para bandidos. esto era algo que habían guardado por hábito y sentido común. por lo tanto, no había problema con vender lo último de alcohol que les quedaba. “bueno, no se suponía que fuera para venta… pero, claro. hasta podemos hacerles una rebaja”. con o sin rebaja, estos eran artículos que habían cargado una gran y peligrosa distancia. el alcohol en particular era pesado, y venía en contenedores que se dañaban fácilmente, lo cual significaba que el precio a menudo era decidido tomando en cuenta márgenes mucho más altos de ganancia que con los otros artículos. obviamente, los hombres bestia también sabían esto, así que felizmente lo compraron al precio que los comerciantes decidieron. “ahora, continuaremos el camino”, dijo uno de los comerciantes. ya fuera porque deseaban recompensar a este amable comerciante, o porque estaban muy contentos gracias a su recién adquirido aguardiente, el líder de los hombres bestia asintió magnánimamente. “supongo que está bien. ¡adelante!”, dijo el líder, haciendo un ademán para que se alejasen.  mientras los conductores ajustaban las riendas, mile preguntó, con un tono determinadamente casual: “¿y, cómo va la investigación de las ruinas?”. “en realidad”, empezó a decir uno de los hombres bestia, “los golems siguen interponiéndose en…”. “…”. “……” “…………”. “¡¿c-cómo diablos sabes sobre eso?!”. como era de esperarse, ella no apuntaba simplemente a lograr que los hombres les permitieran pasar sin incidentes. en ese caso, ¿cuál había sido el punto de venir hacia acá? si lo que querían era pasar, podrían haberse ido directo a casa tras hablar con los soldados. una vez más, los hombres bestia bloquearon el camino frente a la carreta. “¡¿quién diablos son ustedes?! ¡¿cómo saben sobre las ruinas?! ¡o, mejor dicho, ¿cuánto saben?!”. a diferencia del incidente en las ruinas del bosque, aquí, los humanos ya estaban al tanto de que la gente bestia planeaba algo, así que en realidad no era un problema el haber sido vistos. habiendo juzgado que estos comerciantes eran tanto inofensivo como ajenos a la milicia, los hombres bestia habían estado de acuerdo con dejarlos pasar, sin problema alguno— pero la mención que hizo mile sobre las ruinas aparentemente había cambiado la situación. “pues, no mucho, en serio… sabemos que la gente bestia y los demonios han estado investigando unas ruinas según dirección de los dragones antiguos, y que los dragones antiguos buscan algo, pero no le han dicho a nadie qué es. oh, y también que hay algo sobre una civilización pasada, y que a veces los  dragones envían a sus subordinados a revisar, y… ¡creo que eso es todo!”. “¡saben demasiado!”. el hombre bestia parecía afligido. obviamente, era imposible que dejaran ir a unos comerciantes humanoides que sabían todo lo que ellos mismos sabían—y hasta un poco más. “¡¿quiénes son?! si no nos dicen la verdad, entonces—”. “¡pero si no hemos dicho ninguna mentira! digo, es cierto, a veces somos un grupo de comerciantes y sus guardias, y otras veces somos un grupo de comerciantes y sus guardias, y también a veces somos un grupo de comerciantes y sus guardias. sin embargo, nuestra verdadera forma es… un grupo de comerciante… ¡¡¡y sus guardias!!!”. “¡todo eso es lo mismo!”. notando que esta conversación no llegaría a ningún lado si dejaba a mile a cargo, mavis intervino. “somos un grupo de comerciantes y sus guardias”, explicó.   (¡romperse!)   “¡¡¡cálllense!!! ¡todos vendrán con nosotros!”. aparentemente, los iban a llevar directo a las ruinas. ¡perfecto! pensó pacto carmesí, todas sonriendo por dentro, pero esforzándose por mantener una cara de póker en el exterior. los comerciantes sonreían levemente. aunque estuvieran disfrazados de comerciantes, y aunque en general se sentían más a gusto con lápices que con espadas, seguían siendo hombres que trabajaban para su país, y habían  aceptado este deber con cierto nivel de determinación. pueden no haber tenido mucha experiencia en batallas, pero no parecían tener ni una pizca de miedo o arrepentimiento frente a los riesgos que estaban tomando. ya esperaban que algo así ocurriese, e incluso lo aceptaron, durante su reunión en la posada de la capital imperial. de otro modo, era imposible que pacto carmesí los hubiera arrastrado a esta potencialmente peligrosa situación. este era un plan conjunto, con las metas de ambos grupos en mente.   finalmente, llegaron al sitio de excavación, dirigidos por su escolta de hombres bestia. resultaba que, aunque podía llamarse sitio de excavación, si se comparaba a la caótica excavación que había tomado lugar en el bosque, esta era una escena mucho más tranquila, con un agujero enorme en las rocas y varias tiendas y cobertizos grandes a cierta distancia. todos deben estar trabajando dentro del agujero… o al menos, eso asumieron reina y pauline. “¿todos los demás están trabajando dentro?”, preguntó mavis, yendo directo al punto. ante su pregunta, los hombres bestia guardaron silencio, pareciendo como si se hubieran comido un insecto. “supongo que los golems han estado interponiéndose en su camino, y por eso no han avanzado mucho, ¿no?”, comentó mile. “¡¿qué—?! ¡en serio, ¿cuánto saben en realidad?!”. ya habían hablado sobre esto, y la conversación no llegó a ningún lado. mile se estaba sintiendo cansada. “miren, ustedes fueron los que nos dijeron que los golems se estaban interponiendo. y si todavía no saben cómo deshacerse de los golems, es imposible que puedan investigar  las ruinas, ¿verdad? preguntar cuánto sabemos, llegados a este punto, es…”. “guh…”. los hombres bestia se veían molestos, pero como orgullosos guerreros bestia, no podían permitirse golpear a una débil niña humana, especialmente cuando ella no era su enemigo. no pudieron hacer más que apretar sus dientes. “mile, no los molestes. eso no nos va a llevar a ningún lado”, regañó mavis. por algo ella era la amable líder. la brújula moral de pacto carmesí. “déjenme disculparme por ella”, le dijo a los hombres. “como bien saben, nosotros—o mejor dicho, los humanos en general—sabemos las circunstancias. dicho eso, nosotros mismos no tenemos nada que ver con la gente del imperio. no somos más que comerciantes viajeros, quienes vinieron a otro país para vender, así que no tenemos conexión con los ciudadanos de estas tierras. dada la situación, podría ser mutuamente benéfico intercambiar información…”. esto finalmente pareció calmar a los hombres un poco. parecía que estos humanos ya sabían casi todo sobre su situación, así que no había peligro en revelar sus secretos en este punto. por otro lado, ellos podrían aprender una o dos cosas—por ejemplo, información sobre cómo estas personas sabían tanto, o lo que estaba pasando en el imperio. era normal que la gente bestia sintiera que no podían dejar pasar tal oportunidad. “muy bien. hablemos”.   los hombres bestia se sorprendieron al escuchar el recuento de mile sobre el incidente con berdetice, al igual que todo lo que aparentemente era bien sabido en el vecino reino de tils.  aunque pacto carmesí asumió que más información habría sido compartida entre los dragones antiguos, debido al incidente previo con los tres que habían acompañado a berdetice, aparentemente esta información no había llegado a los demi- humanos con los que hablaban justo ahora. por supuesto, era igual de probable que el líder de esta expedición, a cargo de las operaciones y comunicaciones, supiera las circunstancias, pero hubiera considera que no era necesario informarlas a sus trabajadores… aunque, ahora que lo pensaban bien, los demonios que habían estado presentes durante su segundo encuentro con las ruinas tampoco habían sabido nada del primer incidente. además, parecía que los hombres bestia presentes, de hecho, tenían un punto de contacto distinto, ya que el nombre berdetice no significaba nada para ellos. los hombres bestia les dijeron a pacto carmesí que su representativo había cambiado hace poco, y mencionaron uno que otro nombre, pero ninguno que pacto carmesí hubiera escuchado antes. dicho eso, los únicos nombres de dragón antiguo que las chicas conocían eran los de los primeros tres dragones que se encontraron—berdetice, el oficial, y la jovencita. hasta ahora, mile había predicho casi todo lo que los hombres bestia les estaban contando, lo cual significaba que en realidad no habían ganado mucha información nueva. los hombres bestia explicaron que no podían entrar al agujero porque los golems estaban presentes. si eran rodeados por golems en ese oscuro y apretado sitio, sería el fin para ellos. aparentemente, los golems habían empezado a moverse fuera del agujero también, así que todos los demás habían ido a cazarlos. “afortunadamente, fuimos capaces de retirarnos justo cuando nos atacaron, así que no hubo bajas. además, tenemos a nuestros aliados demonios para que usen magia de curación  en quienquiera que sea lastimado, pero esa magia no es todopoderosa. usarla no significa una recuperación instantánea, y el daño interno es más difícil de manejar… por suerte, los golems no usan espadas, así que no hemos perdido muchos brazos o piernas…”. la pérdida de una extremidad era probablemente el destino más cruel para un hombre bestia. ellos tendían a estar muy orgullosos de sus cuerpos, así que, ser incapaces de pelear por el resto de sus vidas debido a una herida sin duda sería doloroso. una batalla contra golems podía causar extremidades aplastadas, lo cual era poco diferente de extremidades cortadas, y muertes instantáneas no eran raras de ver. sin embargo, al menos hasta este punto, los demi-humanos—tanto hombres bestia como demonios—habían tenido pocos muertos o heridas graves… a pesar de haber estado atacando el hábitat de los golems por periodos extendidos de tiempo. ¿los golems fueron informados de no lastimar a ningún humanoide? en cual caso, ¿había algo aquí con la autoridad y habilidad de dar este tipo de órdenes? una vez este pensamiento se le ocurrió a mile, no había forma de que pudiera dejarlo pasar. “¡muy bien! ¡al agujero!”. “¡¿¡¿eh?!?!”. tanto comerciantes como hombres bestia se quedaron sin palabras. pacto carmesí, por supuesto, no esperaba menos. hablamos de mile— obviamente, este sería su próximo curso de acción.  *** “bueno, entremos…”.  mile ignoró las desesperadas protestas de los hombres bestia. no tenía interés en olvidarse de este nuevo plan, y  obviamente, el resto de miembros de pacto carmesí pensaba lo mismo. aunque lo que le sucediera al grupo una vez entraran al agujero no era problema de los hombres bestia, ellos intentaron con todas sus fuerzas detener a pacto carmesí. ya fuera porque estaban en contra de permitir que un grupo de niñas se adentraran al peligro frente a sus ojos, o por alguna otra razón, quizás la determinación con la que trataron de detenerlas era prueba de que en realidad eran gente buena… aun así, no tenían la autoridad para detener a pacto carmesí, y aunque usaran todas sus fuerzas para retener a las chicas, eso ciertamente podría considerarse ilegal. “¿acaso quieren que se esparzan rumores sobre que cuatro niñas fueron atacadas por hombres bestia?”, les preguntó pacto carmesí, y en ese punto, no hubo nada más que dichos hombres bestia pudieran hacer. después de todo, tenían una reputación qué mantener. los comerciantes ciertamente tenían sus propias opiniones sobre el asunto, pero al final, decidieron no intervenir. en el último minuto, pacto carmesí se giró hacia los comerciantes. “si nosotras no regresamos, den media vuelta y regresen a la capital, luego contraten nuevos guardias y regresen a casa”. por supuesto, la probabilidad de que esto ocurriese era minúscula—casi cero, en realidad. ellas seguían técnicamente a mitad de su misión como escoltas, y los comerciantes habían aceptado sin problema que esto formaba parte también de su investigación del imperio. y así, pacto carmesí procedió a entrar a la cueva, sin nada más que magia para alumbrar su camino.   “ugh, ya caminamos casi medio kilómetro…”, se quejó reina.  mile, quien había estado contando sus pasos, rápidamente corrigió esta confusión. “solo han sido trecientos metros”. ya que este agujero no se dirigía directo hacia el suelo, en su lugar siendo una ligera pendiente, no había necesidad de escaleras o escalones. por lo tanto, las cuatro caminaban con normalidad por la pendiente. sin embargo, se dirigían hacia las montañas, así que esto era prácticamente lo mismo que arrastrarse por el suelo… el grupo había viajado un poco más, cuando— “el primer encuentro…”. de repente, se vieron rodeadas por seis golems. las miembros de pacto carmesí no se preocuparon. gracias al reporte de los hombres bestia, sabían que los golems habían tenido cuidado de no matar demi-humanos, y ellas sabían que ellas mismas no parecían especialmente fuertes. además, pacto carmesí no tenía la intención de buscar pelea. sólo habían venido a investigar. aparte, fue gracias al hecho de que mile tenía la habilidad de llegar a entendimientos con los golems, a través de las nanomáquinas, que había podido dar tal explicación optimista al resto. en su encuentro pasado, mile había llegado a un entendimiento no solo con la misteriosa terminal, sino con los carroñeros también—los carroñeros quienes parecían ser los seres a los que los golems llamaban al encontrar algo fuera de su jurisdicción. siempre y cuando no se infiltraran y atacaran a cualquier golem que se topearan, como los hombres bestia probablemente habían hecho, pacto carmesí creía poder lograr un más razonable primer contacto. y, además, en caso de que sucediera lo peor, podían escapar. asumiendo que eventualmente se encontrarían en una situación como esta, mile había reabastecido su inventario de  metal, el cual había disminuido durante sus previos actos humanitarios. “vengan, pss pss pss pss…”. “escucha, no son animales callejeros como para que los llames así”. ignorando las protestas de reina, mile sacó metal de su inventario y se lo ofreció a los golems. se detuvieron, y observaron con detenimiento los objetos… exactamente igual que la última vez. luego, tras un corto tiempo, un carroñero apareció. miró la chatarra, luego a mile, y con habilidad recolectó el metal. “¿eh? parecen menos receptivos que la última vez. no se veía muy agradecido. ¿será porque la calidad del metal no es la mejor?”. cuando mile dijo esas palabras, el carroñero de repente se sacudió de forma extraña. por varios segundos, ella creyó que este se había congelado por completo, hasta que de un momento para otro comenzó a alejarse velozmente, pareciendo haber dado algún tipo de señal a los golems. cierto, el carroñero no había dado comandos verbales o una señal física, pero cuando su comportamiento cambió, también lo hizo el de los golems, así que era razonable asumir que algún tipo de comunicación había ocurrido. los golems cambiaron su posición, separándose de tal forma que hubiera tres dirigiéndose más profundo en la cueva, y otros tres mirando hacia la entrada, cada grupo con una formación de punta de flecha. “m-mile, ellos…”. “sí, es una formación defensiva. o también…”. “¿o-o también?”.  “¿una forma de asegurarse que se nos haga imposible escapar?”, dijo mile. las otras tres guardaron silencio. con el carroñero como su guía, pacto carmesí prosiguió más profundo en la cueva. finalmente, llegaron a… “… ¿una herrería?”. mavis, reina, y pauline no pudieron pensar en otra palabra para la vista frente a ellas. mile, sin embargo… “¿una fábrica?”. para tres chicas del grupo, era normal esperar que “forja” o “herrería” fueran las únicas palabras que pudieran pensar para describir un lugar donde el metal era procesado y había chispas volando por todos lados. ellas obviamente jamás habían visto o escuchado de otros sitios donde el metal fuera trabajado. sin embargo, este lugar estaba claramente en un nivel distinto a cualquier “herrería”—y por ello “fábrica” era un término mucho más apropiado. además, era un establecimiento más ostentoso que las pequeñas instalaciones que mile había imaginado que se mantenían para la reparación y creación de golems… mile había asumido que serían llevadas a algún modesto y apenas funcional sistema de control, similar al que habían encontrado en las ruinas pasadas. cuando sus expectativas eran puestas de cabezas, sólo había un lugar al que acudir. oigan, nanos, ¿ustedes le dijeron a esta cosa que nos trajera acá? no. no hemos tenido ningún contacto con las máquinas de este sitio. pensamos que sería imprudente influenciar sus acciones, señorita mile… oh, sí, gracias. es bueno saberlo. entonces, ¿qué saben sobre nuestra situación actual?  no tuvo más opción que preguntar. las nanomáquinas, se aseguró ella misma en su mente, sabían cosas que podían decirle que ella jamás podría descubrir por su cuenta. bueno, como probablemente usted ya ha asumido, esta es otra de las ruinas. en este sitio, hay carroñeros para reparaciones, golems para defensa, y esa maquinaria de construcción. no hay terminal presente, como en el sitio anterior. todas las operaciones aquí son dirigidas según el juicio de los carroñeros. ¿eh? entonces, ¿por qué actuaron de forma tan amable con los demi-humanos? la mayoría de golems normales no tienen reparos en matar a cualquier intruso en el acto. ¿y a qué se debe el tratamiento especial que nos están dando? ¿le gustaría saber? uh… ¿le gustaría saber? s-sí, me gustaría saber. mile suspiró. aparentemente, no le quedaba de otra más que confiar en las nanomáquinas una vez más. estan actuando como subordinados. ¿eh? son subordinados. estas ruinas, y todos los carroñeros y golems presentes, estan bajo su comando, señorita mile. esperen, ¡¿de qué están hablando?! ¡explíquenlo de forma fácil! mile claramente estaba desconcertada, así que las nanomáquinas trataron de explicar.  en las otras ruinas, usted aceptó la autoridad de “guardiana”, ¿no es así? s-sí… pensé que así, esas formas de vida mecánicas tendrían un poco más de motivación, o al menos paz y tranquilidad… las máquinas sintieron su intención. ¿en serio? qué bien… gracias a su abolición de varias restricciones, el area de operaciones para esos individuos incrementó, y comenzaron a dirigirse a reparar otras instalaciones inactivas, incrementar los números de producción de carroñeros, y reiniciar operaciones en varias otras ruinas. este sitio es una de ellas, y por lo tanto… ¿y p-por lo tanto…? mile estaba teniendo un mal presentimiento. obviamente, este lugar recae bajo su autoridad también. usted es la gobernante de estas ruinas, señorita mile. “¡me lo imaginabaaaaa!” su premonición había dado justo en el clavo. entonces, estas ruinas son… sí, anteriormente, todas las operaciones habían cesado aquí, pero se reiniciaron recientemente, gracias a los carroñeros. por supuesto, una gran porción del equipo aquí estaba oxidado, así que probablemente tuvieron que reconstruirlo todo casi desde cero. apenas tienen un grupo de carroñeros y golems defensivos construidos aquí, así que, en el presente, parecen encontrarse en la fase de  manufacturación de maquinaria para reparar las ruinas. ya veo, ya veo… lo que parece que ocurrió aquí fue que asignaron su apariencia e impresión vocal a una imagen viva, y la reconocieron a usted como su “guardiana”, tras lo cual la trajeron a esta área. parecen creer que usted les dará nuevas instrucciones. ya veo, ¿entonces los carroñeros vinieron acá por las órdenes que les di la última vez y comenzaron a reproducirse? ¡¿eso quiere decir que todos los carroñeros aquí están siguiendo esas mismas órdenes?1 entonces por eso tuvieron cuidado de no lastimar humanoides o demi-humanos, siempre y cuando ningún intruso los atacara… siendo honestos, ella les había dado esas instrucciones con la esperanza de que fueran más proactivos a la hora de proteger las ruinas, pero quizás sus defensas eran tan buenas que podían incluso comportarse de forma amable. podrían comportarse de forma más seria si eran acorralados. hasta llegar a ese punto, confiarían en sus defensas construidas. entonces, ¿ahora hay infestaciones repentinas de golems en áreas donde los golems no vivían antes, y se dio la casualidad de que unos grupos que fueron enviados a investigar las ruinas se toparon con los golems, independientemente de si sabían de su existencia o no? ¿o se debió a una re-investigación de ruinas que habían asumido “muertas” porque notaron la reaparición de los golems? o… “¡mile! ¡oye, mile!”. “ah…”. mile había estado teniendo esta conversación interna mientras las demás estaban ocupadas mirando asombradas las  instalaciones, pero aparentemente habían regresado en sí en algún punto. “¿por qué te ves tan sorprendida?”, preguntó reina, asumiendo que mile estaba asombrada por el escenario frente a ella. este lugar era completamente diferente de los pequeños centros de reparación de golems que habían visto antes. el último lugar que habían visto era más parecido a un pequeño taller de pueblo con pocos empleados, del tipo donde unas cuantas personas se reunían en mesas para hacer reparaciones… lo que había frente a ellas ahora era mucho más grande. aunque no suficientemente grande para ser llamada una fábrica enorme, era un área espaciosa, donde al menos sesenta carroñeros se encontraban construyendo varios objetos grandes y cilíndricos. los objetos tenían tres o cuatro metros de diámetro, y en cuanto a su altura… bueno, cada pieza era de apenas unos metros de alto, pero parecía que las unirían luego, así que no estaba claro cuán grande se suponía que fuera el producto final. entre el sitio donde pacto carmesí se encontraba y el área de trabajo, había una pared transparente. las demás miembros probablemente asumieron que se trataba de simple vidrio. era verdad que la tecnología de este mundo no estaba desarrollada al punto de crear vidrio así de claro y alto, pero, aunque tal logro era impresionante, no era misterioso en realidad. sin embargo, no era vidrio… “¡n-no, estoy igual de sorprendida que ustedes!”, dijo mile rápidamente ocultando su desconcierto por lo que había escuchado de las nanomáquinas. en realidad, no era necesario que tratara de ocultarlo. a pesar de su pregunta, reina no creía que mile estuviera más impresionada que el resto de ellas. en momentos así, mile era siempre la más tranquila, e incluso  ahora, aunque el sudor llenaba su frente, y tenía una expresión afligida, no estaba viendo la escena del mismo modo que las demás: con la quijada hasta el suelo y los ojos abiertos como platos. “bueno, voy a tratar de descubrir lo que está pasando…”, dijo mile. esto tampoco fue una sorpresa para ninguna de las demás chicas. desde el incidente previo, las demás chicas de pacto carmesí habían asumido que mile poseía algún tipo de habilidad para “domar monstruos” o algo así que le permitía comunicarse con criaturas mágicas como estas, las cuales claramente habían sido creadas por algo poseedor de inteligencia similar a la humana. por supuesto, esto no era algo que podría considerarse normal en este mundo, pero eso era lo de menos. gracias a la frecuente aparición de personajes del tipo “domador de bestias” en los trabajos de la prolífica autora anónima miami satodele, profunda amante de todo lo felpudo, estas eran habilidades que muchas personas conocían—y que incluso eran trabajos soñados para los más devotos lectores. ahora, nanos, si pudieran interpretar… esta vez, no había nada parecido a una terminal, así que mile tendría que hablar directamente con los carroñeros. sin embargo, aunque aquella terminal no era más que una copia de seguridad de la copia de seguridad de la copia de seguridad de una i.a. especializada, seguía siendo aparentemente un sistema de control, mientras que los carroñeros no eran más que unidades operacionales individuales. aunque tuviera la ayuda de las nanomáquinas, no estaba claro cuánto de las intenciones de mile podrían comunicar. sin embargo… ah, parece que ellos pueden entenderla. ¿eh?  bueno, es verdad que la última vez no fueron capaces de comprender sus palabras. sin embargo, imagine: si su tan esperado “guardian” finalmente aparece, y no es capaz de entender sus ordenes por una barrera lingüística, obligandola a confiar en un interprete ajeno a todo… ¿usted sería capaz de soportar algo así? sería horrible, y no sabría si todo estaría traduciéndose de forma correcta… además, debido a restricciones previas, su contacto con humanoides estuvo limitado, pero gracias a usted, ellos han sido capaces de acercarse a asentamientos humanoides, e incluso de infiltrarse en algunas comunidades. además, ya no les preocupa la falta de materiales y han progresado al punto de minar y refinar sus propios metales. por lo tanto, han creado pequeñas máquinas recolectoras de información del tipo insecto y ahora pueden comprender con facilidad el lenguaje utilizado por las personas modernas… robots espías en miniatura… qué aterrador. en este mismo instante, podría haber robots espías pegados a ella, la guardiana. la idea envió escalofríos por la espalda de mile. … escuchando el miedo de mile, las nanomáquinas empezaron a inquietarse. miniatura. siempre pegados a ella. recolectando todo tipo de información.  ahora que lo pensaban, las nanomáquinas cumplían cada una de esas características. ……… s-s-son solo herramientas, con capacidades de grabación de audio. son una versión más pequeña de esas “grabadoras” que usted describió con anterioridad, señorita mile, ¡la única diferencia es que estas tienen alas y extremidades! ¡eso es todavía peor! mile hizo una mueca, pero basándose en la descripción de las nanomáquinas, ella se había imaginado algo como una cucaracha, por lo cual no había hecho ningún tipo de conexión mental con las nanomáquinas en sí. sintiendo esto por el comportamiento de mile, las nanomáquinas dijeron con arrogancia: todo de acuerdo al plan… ¿dijeron algo? em, no. mile entonces se giró hacia el carroñero guía, quien había estado esperando pacientemente a su lado, y preguntó: “¿puedes entenderme?”. el carroñero asintió ampliamente. como era de esperarse, su construcción había incluido capacidades de escucha, para poder revisar sus alrededores y aceptar las órdenes de su guardián, pero no había necesidad de que pudiera hablar. sin embargo, gracias a su información reunida, ellos aprendieron que los humanoides tenían ciertos métodos para comunicar sus intenciones sin utilizar palabras, y así lograron dominar el arte de los gestos.  … ¿o quizás, esta había sido una función necesaria en la era de sus guardianes anteriores, en el distante pasado, y los gestos con significados simples simplemente no habían cambiado mucho con las generaciones? señorita mile, debería decirle algo, dijeron las nanomáquinas. pero en realidad, mile no sabía qué decir. hmm… si les termino diciendo algo raro, va a causar problemas, pero decirles cosas complicadas, para hacerlos conscientes de sus propias razones para vivir, un poco de motivación, creo que sería… estos eran seres artificiales, reproducciones de un original inexistente en esta época, persistiendo a través de su propia replicación. ¿podrían tener esperanzas? ¿o sueños? mile lo pensó por un tiempo y luego le habló con dulzura al carroñero: “vivan, cumpliendo las expectativas de las personas que los crearon. y por favor, protejan este mundo”. curiosamente, estas palabras eran muy parecidas a las que las nanomáquinas habían expresado a la terminal la última vez, justo antes de salir de las ruinas…      *** “mile, ¿qué fue todo eso?”, preguntó reina mientras regresaban a la entrada. mile había dicho las últimas palabras en voz alta al carroñero, así que obviamente las demás la habían escuchado. la curiosidad de reina era normal. “n-nada, sólo les di unos elogios por trabajar tan duro… espero que algún día nos den la misma consideración básica”. ciertamente, en su vida pasada, misato había sido el tipo de niña que le agradecía a cada policía de tráfico, y siempre hablaba con los ancianos que limpiaban los parques. misato había sido incapaz de recordar sus caras, pero con solo ver al policía o conserje, ella podía saber que era seguro hablar con ellos. por supuesto, en esta vida previa, siempre existía el riesgo de meterse en problemas si misato les hablaba a los hombres equivocados, así que su hermana le había prohibido hablarle a cualquier persona… “supongo que ahora nos están devolviendo el favor…”, dijo reina, mirando a los individuos delante y detrás de ellas. había doce golems y seis carroñeros. “¿por qué hay más ahora? entiendo que fuera así cuando entramos, pero ahora que estábamos por irnos…”, dijo pauline, pareciendo desconcertada”. “un misterio muy misterioso”, bromeó mavis, sacudiendo su cabeza. ella, por supuesto, estaba citando una de las frases favoritas de cierta autora. justo antes de que alcanzaran la salida, los seis golems al frente salieron primero, probablemente para asegurarse de  que era seguro salir. los carroñeros y los otros seis golems formaron un diamante doble—una formación de batalla, para proteger a pacto carmesí. “¿por qué nos están tratando como a la cruz imperial?”, preguntó reina, asombrada. “bueno, mile viene con nosotras”, dijo mavis, suspirando. “sí, mile está aquí…”, aceptó pauline. mile trató de ignorarlas riéndose, pero— “¡whoa!”. cuando salieron del agujero, encontraron la entrada rodeada por hombres bestia y demonios, todos listos para pelear. aparentemente, los hombres que habían sido despachados regresaron. y entonces… “¡maldición! ¡dejen ir a esas chicas, monstruos!”. ah, ya veo lo que pasa. los seis golems que salieron primero habían formado un semi-circulo frente a la entrada de la cueva, y en medio de este se encontraba el resto, aun en formación de diamante doble. a este paso, parecía que una batalla empezaría, pero, por supuesto, los golems no harían el primer movimiento. en cuanto a los demi-humanos, ellos creían que pacto carmesí había sido tomado como rehén, poniéndolos en un punto muerto. sin embargo, no podían verse con odio por siempre, y mientras más aumentase la tensión, más probable era que alguien no lo soportara e hiciera algo desafortunado. y en una situación así, no cabía duda que quienes no aguantarían no serían los golems, sino los demi-humanos. mile no iba a quedarse de brazos cruzados a esperar que eso pasara.  “em, ¡gracias por traernos hasta acá! ¡regresen a sus tareas normales!”. según las ordenes de mile, los carroñeros y golems hicieron un movimiento, como si asintieran, y se retiraron al interior de la cueva. “uh…”. los demi-humanos se quedaron sin palabras, con los comerciantes parados detrás, viendo con expresiones de preocupación. “u-u-u-ustedes…”. “c-c-c-c-cómo es que…” “¡¿¡¿¡¿pueden controlar a los golems?!?!?!”, gritó la multitud. sí, hasta da miedo, estuvieron de acuerdo las otras tres miembros de pacto carmesí. “¡no los controlaba! ellos solo defendían su hogar— ¡son muy amigables siempre y cuando no los ataquen o amenacen su territorio!”. “¡¿¡¿de qué diablos estas hablando?!?!”. y que lo digan. las otras tres miembros de pacto carmesí sólo pudieron suspirar. tanto la incredulidad de los demi-humanos como el cansancio de pacto carmesí era de esperarse. pero a este paso, la conversación seguiría para siempre. justo cuando pacto carmesí empezó a preguntarse qué hacer… “¡llegaron!”, gritó uno de los hombres bestia, mirando hacia el cielo. los demás voltearon a ver también.  ciertamente, algo se acercaba, volando por los aires, aleteando con su cuerpo que, aerodinámicamente hablando, no debería ser capaz de volar. “bueno, parece que todas las estrellas de la obra se reunieron”, bromeó mile, aunque como siempre, su broma fue ignorada. “tenemos una forma de llamar a los dragones antiguos”, explicó el líder de los hombres bestia. “no se supone que la usemos en situaciones triviales, pero este es un caso especial, dado que aparecieron humanos que parecen saber más que nosotros. necesitamos consultar con ellos sobre este asunto, y dejarles la decisión a ellos…”. esto era perfectamente razonable—de hecho, era el tipo de explicación razonable y normal que mavis, reina, y pauline en particular, no habían escuchado en mucho tiempo. el dragón voló directo hasta pacto carmesí, y aterrizó con gracia frente a ellas. el hecho de que no hubo un fuerte viento o torbellinos de polvo era una prueba más de que el vuelo de los dragones se daba por fuerza mágica y no por aerodinámica. “¡¿cuál es la razón para hacerme venir hasta acá?! ¡¿qué problema ha ocurrido?!”. el dragón antiguo empezó a rugir apenas aterrizó, observando la escena con lo que parecía una mezcla de enojo y preocupación. entonces, su mirada se detuvo en un punto particular. ¡(estremecerse)! (frotar), (frotar). por un momento, el dragón se estremeció, y frotó sus ojos con sus patas delanteras, inhalando, y se puso tenso. todos guardaron silencio por lo que pareció una eternidad— aunque no pudieron haber sido más de diez segundos. hasta que…  “¡pero si es la señorita mile! ¡qué esplendida fortuna que nuestros caminos se hayan cruzado de nuevo en un sitio así! oh, podrá ser que— ¿usted fue la que me llamó? en ese caso, ¡a sus órdenes!”. “¡¿qué diablos está pasando?!”, tanto los demi-humanos como los comerciantes gritaron con comprensible incredulidad. acababan de ver a un orgulloso dragón antiguo rebajarse al puesto de un simple chico de los mandados frente a una pequeña chica humana. pacto carmesí tuvo prácticamente la misma reacción. “¿quién eres?”, preguntó mile, con sospechas. el dragón la miró, confundido. “¡soy yo!”, insistió el dragón, pero claramente, era necesaria más información. era imposible que un humano pudiera distinguir a los dragones antiguos uno de otro. era como esperar que alguien reconociera a un pez o supiera diferenciar entre dos aves de la misma especie. “¡soy yo, kragon!”. “no, o sea… ¿quién eres?”. el dragón parecía un poco enfadado, quizás lastimado por haber sido olvidado. “ah… supongo que nunca les dije mi nombre esa vez… soy yo, al que le pegaron la cola…”. “¡oh!”. con eso, pacto carmesí finalmente recordó. “parece que recuerdan el incidente. entonces, ¿cómo puedo servirles en esta ocasión?”. ellas no habían sido las que lo llamaron, así que pacto carmesí volteó a ver a los demi-humanos. sin embargo… estos estaban congelados, bocas abiertas, y claramente no serviría de nada hablarles.  “esto apesta…”, suspiraron las miembros de pacto carmesí. por otro lado, mile pensó para sí misma: ¿kragon el dragón? pensé que los dragones tendrían nombres más… ¿dignos? supongo que hasta los dragones pueden ponerles nombres tontos a sus hijos…  *** “entonces eso es lo que ocurre…”. luego de la explicación de mile, el dragón sin-cola—em, kragon—rápidamente comprendió la situación. “sí, entonces, en resumen, no había nada en estas ruinas antiguas—ni materiales o maquinaria. eran sólo pilas de óxido y espacio vacío. los carroñeros que llegaron aquí crearon a los golems, y parecían estar haciendo otra cosa también, pero asumo que lo que ustedes, los dragones antiguos, están buscando, son cosas del pasado distante—registros, ¿tal vez?”, preguntó mile. kragon asintió. “entonces”, prosiguió mile, “no tiene caso que los demi- humanos peleen contra los golems y carroñeros, ¿verdad? sólo estarían sacrificando a los demi-humanos sin ganar nada. en el peor de los casos, los carroñeros y golems de este sitio podrían considerarlos a ustedes y a los demi-humanos como enemigos, y comunicárselo a los demás carroñeros y golems del continente. si eso pasa, sus investigaciones de las ruinas van a volverse más complicadas”. “em…”. “además, ustedes serán los responsables de…”. “ghh…”. “… ¡la extinción global!”. “¡¡¡gaaaaah!!!”.  “¡vamos, no lo molestes tanto!”, dijo mavis, golpeando ligeramente a mile en la cabeza. “lo más caballeroso sería ayudar—aunque sean dragones antiguos. ¡pero antes! ¡¿por qué me miras así?!”. los demi-humanos estaban viendo el intercambio entre mile y kragon, desconcertados. era de esperarse. era impensable ser tan franco y casual, retador incluso, con un dragón antiguo, la criatura más cercana a una divinidad. aunque, por supuesto, en primer lugar, era extraño que un dragón antiguo se rebajara así frente a un humano… “como sea, hablando sobre lo que estas chicas dijeron…”. “sí, tienen razón en todo. las personas de su país ya saben sobre nuestras actividades, y este grupo en particular tiene una conexión muy profunda con nuestro trabajo… y también son mis salvadoras. consideremos este sitio ‘irrelevante’, empaquemos, y vayamos a otro de nuestros sitios de investigación”. kragon pasó a un tono más dignificado al hablar con los demi-humanos, pero, ya era un poco tarde para querer verse digno… “kragon, ¿no eras parte de los cuerpos de batalla?”, preguntó mile con normalidad. “¿por qué estás haciendo el mismo trabajo que un novato como berdetice?”. los hombros de kragon parecieron hundirse un poco. “fuimos un trio de dragones antiguos que llegaron a casa lastimados y llenos de sangre por pelear con cuatro humanos— específicamente, niñas. ¡¿ustedes qué creen que pasó?!”. “¡lo sentimos!”, dijo pacto carmesí al unísono. “pero, esto es preocupante…”. kragon cambió de tema, aunque claramente no a algo más alegre.  “¿hm? ¿qué cosa?”, preguntó mile. “bueno, obviamente, voy a tener que reportar este incidente a nuestro líder. después de todo, todo esto lo hacemos por órdenes del mismo. me pregunto qué pensará cuando sus nombres vuelvan a aparecer…”. “ah…”. contando su encuentro previo, pacto carmesí ya había repelido dos veces a los dragones antiguos, lo cual debería haber sido suficiente para ganarse una visita de un escuadrón de aniquilación. probablemente otros dragones antiguos ya han luchado desesperadamente para persuadir al líder contra este tipo de acción impulsiva. sin embargo, luego de un tercer incidente… por supuesto, esta vez ellas no habían repelido a nadie. de hecho, ¡ni siquiera estaban interfiriendo con la investigación de las ruinas! dicho eso, uno podía estar seguro que los demi-humanos reportarían la forma en que los golems y carroñeros actuaron con pacto carmesí, y quién sabe cómo el líder de los dragones reaccionaría a estas noticias. además, kragon tenía sus propios deberes y responsabilidades, y aunque, durante su conversación pasada, él había jurado no atacar personalmente a pacto carmesí, no podía darle un reporte falso a su clan, líder, y ancianos. tenía su honor de dragón antiguo qué mantener… “hmm. supongo que no queda de otra… estoy segura que algún subjefe va a venir por nosotras, tarde o temprano”, murmuró mile. “¿subjefe?”. “¿dijiste subjefe?”. “¿crees que nos atacará un subjefe? bueno, ya que hablamos de ti, puede ser…”.  pauline, mavis, y reina asintieron. como era de esperarse, el concepto de “subjefe” se había vuelto conocimiento común, gracias a los trabajos de cierta famosa autora. “un subjefe…”. aparentemente, las novelas de esta autora eran famosas incluso entre los demi-humanos. “en todo caso, ¿dónde está su base, esa aldea que tanto mencionan?”. “un poco al sureste de aquí”. “¿eh?”. a las miembros de pacto carmesí les sorprendió escuchar una respuesta tan directa a la pregunta casual de mile, pero el resto de personas reunidas—tanto demi-humanos como comerciantes—no parecían particularmente sorprendidos. a menos que fuera una remota isla solitaria, era imposible que un grupo de dragones antiguos pudieran vivir en el mismo lugar durante miles de años sin que nadie se enterara. después de todo, habría testigos de la dirección hacia la que volaban, y de vez en cuando debe haber quiénes van tras los dragones directamente, ya sea con la esperanza de que les cumplan un deseo, o en búsqueda del título de “matadragones”, o algo así. por lo tanto, las únicas cuatro personas que se sorprendieron por la respuesta de kragon fueron las tres miembros de pacto carmesí, quienes habían asumido que su base sería un secreto, una aldea oculta, y mile, a quien jamás se le habría ocurrido que los dragones antiguos pudieran vivir tan cerca. “s-si está hacia el sureste, eso estaría muy cerca del océano, ¿verdad?”, preguntó mile, con una expresión rara en su cara. “sí”, respondió kragon, “no vivimos lejos del mar”. “así que la aldea de los dragones antiguos se encontraba en el imperio…”.  ahora que lo pensaba bien, si viajabas hacia el norte por la línea costera y entrabas al reino de tils, llegarías al bosque donde pacto carmesí se encontró por primera vez a berdetice— e ir al este-noroeste por sobre el agua te llevaría al país donde se habían topado con kragon y los demás. mientras más lo pensaba, más sentido tenía. y, de hecho, este era el hábitat por excelencia de los dragones—con cordilleras salvajes y escarpadas y todo eso. “entonces, ¿qué harás, mile?”, preguntó reina. “em, bueno, por ahora, creo que deberíamos dejar que kragon reporte esto a la aldea, y luego vemos qué pasa. se supone que tenemos que proteger a los comerciantes”, respondió mile. “¡no  me refiero  a eso!  eso  también  es importante, claro, pero lo que  te  preguntaba  es qué vas  a hacer con  este lugar. ¿qué crees que hará el imperio cuando estos sujetos se vayan? han estado bastante tiempo aquí cerca haciendo preparativos militares y acumulando municiones. si la amenaza que los hizo cambiar de invadir otros países a tratar con asuntos internos desaparece de repente, y los demi-humanos ya no parecen ser una amenaza, entonces tendrán ya listo un ejército para movilizar, y suministros por montón. y además están todos esos negocios que han estado comprando bienes que creen poder vender a la milicia a un alto precio, apostando a que ocurrirá una guerra… ¿qué crees que pasará si los demi-humanos desaparecen sin más y el imperio se queda sin adversario?”. “ah…”. no cabía duda de que el imperio albarniano empezaría a invadir otros países de inmediato—comenzando con la base de operaciones de pacto carmesí: tils, al noreste, o con la tierra natal de mile: brandel, al norte, o con el reino de vanolark, al noroeste.  “hmm, ¿qué hacemos…?”. justo cuando mile empezó a pensar profundamente, uno de los comerciantes intervino. “no necesitan preocuparse por eso”. “¿eh?”. “esta tierra ya estaba preparándose para la guerra antes del asunto con los demi-humanos. este incidente les puso un alto temporal a sus planes, pero retomarán sus actividades tarde o temprano. sería una cosa si hubiera sido una revuelta sistemática de todos los demi-humanos del país, como habían estado temiendo los altos mandos, pero si este es sólo un asunto restringido, con una explicación tan simple, entonces ellos jamás habrían mandado la mayoría de sus fuerzas hacia acá. es sólo cuestión de tiempo para que busquen conflictos más grandes—y eso no es algo por lo que ustedes, chicas, deban preocuparse”. “hmm, sí, es cierto… pero eso también significa que cuando los demi-humanos se vayan, los soldados imperiales van a investigar este lugar para descubrir exactamente lo que estaban haciendo aquí. si eso pasa, habrá una confrontación directa entre los soldados y los golems…”. en cuanto al mundo—o al menos, el reino de tils—una batalla entre los golems y los soldados imperiales sería más que bienvenida. aunque los monstruos sólo dejaran a algunos soldados imperiales fuera de servicio, la batalla carcomería sus recursos y sería trabajo extra para ellos… sin embargo, mile no era el tipo de persona que dejaría ocurrir la destrucción sin sentido de los golems, quienes se habían vuelto sus seguidores, aunque fuera sólo en nombre. “hmm… ¡oh, ya sé!”. ¡ping!  mile sonrió, con tal resplandor que uno podía prácticamente imaginar el foco sobre su cabeza encendiéndose, justo como en esas tiras cómicas antiguas. “creo que es hora de que pagues tu deuda”, dijo mile repentinamente a kragon. “¿eh?”. kragon se veía confundido. “bueno, la vez pasada, salvamos tu vida, aunque tú fuiste el que nos atacó y trató de matarnos—e incluso te pegué la cola, ¿verdad? estoy segura que ningún orgulloso dragón antiguo sería tan sinvergüenza como para no reconocer eso como una deuda…”. “¡p-p-por supuesto que no! ¡no hay tal cosa como un cobarde en nuestras filas!”. al escuchar esto, mile mostró una sonrisa retorcida. todo va de acuerdo al plan… “en ese caso, tengo una petición también—”. pauline estaba lista para saltar a la espalda de la solicitud de mile con su propia artimaña. reina y mavis sólo pudieron hundirse de hombros.   capítulo 90: una retirada “¡¿q-qué es eso?!”. “¿un wyvern? … ¡n-no! eso es…”. “¡un dragón antiguoooo!”. de repente, un dragón antiguo vino volando hacia las tropas imperiales que habían estado monitoreando la región que los demi-humanos estaban ocupando. los soldados entraron en pánico. obviamente, en tierras conocidas por haber sido habitadas por dragones antiguos en el pasado, no eran pocos los rumores sobre escuadrones que ofendieron a un dragón y fueron aniquilados, o territorios enteros convertidos en tierras inhabitables tras enojar a un clan de dragones. aunque gastaran todos sus recursos y sacrificaran a un gran número de hombres para derrotar a un solo dragón, tendrían que enfrentar luego a sus compañeros, en busca de vengar a su familiar. y entonces, sería el fin para cualquiera que tratara de oponérseles. había numerosos casos de familias reales siendo aniquiladas, seguido por cambios completos de líderes nacionales, como resultado de encuentros con clanes de dragones antiguos. por lo tanto, nadie en este país jamás le pondría una mano encima a un solo dragón. ciertamente, si se enfrentaban a un dragón antiguo, lo único que podía hacerse era arrodillarse y disculparse—y si eso no era suficiente, lo mejor era morir, para no volverse una carga para los demás. este era parte del deber de cada ciudadano de estas tierras. sin embargo, aquí se encontraban los soldados, enfrentados contra un dragón antiguos. se encontraban congelados en su lugar, como estatuas.  el dragón antiguo voló hacia ellos… y aterrizó, justo antes de alcanzar a los soldados. su sitio de aterrizaje estaba rodeado de rocas y árboles, y no mostró señales de acercarse más. “¿estamos… a salvo?”. el dragón había aterrizado en el lugar donde los demi- humanos estaban. luego, tras un rato… “¡está despegando!”. un soldado que había estado observando el lugar donde aterrizó el dragón anunció en voz alta. ¡gracias al cielo! ¡estaba regresando a su hogar sin problemas! o eso pensaron todos. hasta que…   ¡ka-thoom!   en lugar de volar hacia la dirección por la que vino, el dragón voló hacia los soldados, y en tan solo unos segundos, había aterrizado frente a ellos. “¿quién es su comandante?”. estamos condenados. esto fue lo único que pensaron los hombres: en este punto, no tenían otra opción más que ofrecer sus vidas para prevenir la destrucción del imperio. cuando se trataba de dragones antiguos, este espíritu de autosacrificio estaba tan profundamente inculcado en cada albarniano que, incluso los peores rufianes—aquellos que matarían decenas, e incluso cientos de humanos sin pestañear—no podrían soportar ser la causa de la muerte de decenas o centenas de miles, y la causa de la destrucción de su tierra natal.  cuando se trataba de esto, hablábamos de una aniquilación completa, incluyendo padres, familia, amigos, colegas, mentores, y vecinos… todos a los que conoces, y todos los que te conocen—cada humano, no, cada ser vivo—morirán. todos perecerán maldiciendo tu nombre con su último aliento… no había persona viva que pudiera soportar algo así. por eso, en su lugar, preferían morir. no tenía caso resistirse. esto era de conocimiento común para todos los ciudadanos de estas tierras. “yo soy el que está a cargo”, dijo el comandante, dando un paso al frente. su corazón se encontraba tan plácido como la superficie de un lago durante un día sin viento. quizás, ahora que enfrentaba a la muerte, había alcanzado un estado de iluminación. una ligera sonrisa apareció en su cara. sin duda, ahora él no era más que un sacrificio, ofrecido para apaciguar la ira de los dragones antiguos, como los muchos otros que habían venido antes que él… el dragón antiguo simplemente miró al comandante y habló. “hemos construido un segundo hogar en las montañas cercanas, y ustedes no tienen permitido entrar. siempre y cuando no pongan un pie en esa parte de las montañas, pueden seguir usando este camino. ¿entendido?”. “… ¿s-sí…?”. “¿en-ten-di-do?”. “¡s-sí!”. el comandante se encontraba desconcertado. ¿qué más podía decir? si podía evitar una crisis de dragones antiguos sin perder ni una sola vida, sería un héroe nacional, le darían insignias—no, medallas, tierras, y probablemente el título de  noble. al menos, era imposible que fuera castigado o siquiera regañado por este curso de acción. “muy bien. ¡adiós!”, dijo el dragón mientras finalmente despegaba, esta vez volando hacia el sureste. “¡¡¡n-n-n-n-nos salvamos!!!” los soldados se alegraron, aun pegados como estatuas a los sitios donde se habían congelado con terror. oculta por su magia de cobertura, mile sonrió desde donde había estado observando la escena. todo va de acuerdo al plan… *** “en resumen, ya solo hay una muy pequeña posibilidad de que los soldados vengan a este lugar”, reportó alegremente mile. “¡es obvio que jamás vendrán!”, dijeron las otras tres miembros de pacto carmesí. los demi-humanos, por supuesto, seguían en silencio. “ahora, siempre y cuando ustedes no se peleen con soldados imperiales, estarán bien. si se separan en pequeños grupos y parten por la noche, deberían poder llegar a casa sin problemas. los golems tampoco molestarán a los soldados, por lo que deberían poder vivir en paz…”. “no solo los soldados”, agregó reina. “¡nadie va a venir nunca! ¡habrá un decreto oficial sobre no poner pie en esta zona en poco tiempo! probablemente será un decreto tan estricto que, si llegas a poner un solo dedo más allá del límite, te colgarán”. “sí, bueno, tiene sentido. un paso en falso y el país completo podría caer”. mavis se hundió de hombros.  “¿eh? esperen— ¿entonces eso no significa que mile dio más de un paso en falso al casi matar a varios dragones antiguos… dos veces?”, preguntó pauline. reina y mavis se hundieron de hombros. eso ya era agua pasada.  *** kragon el dragón antiguo partió, y se decidió que los demi- humanos se retirarían en varios grupos pequeños durante la noche. mientras tanto, mile llamó a los carroñeros, instruyéndoles que emplearan todo tipo de tácticas de engaño, tales como construir una réplica de tamaño real de una cola de dragón antiguo, la cual podrían sacar desde la entrada de la cueva si algún humano se acercaba, al igual que dispositivos para reproducir el rugido y aliento de un dragón. con precauciones así, estarían bien por el momento. adicionalmente, este evento causaría probablemente suficiente revuelo entre los líderes del país para no poder concentrarse en invasiones por el momento. por supuesto, una vez este caos fuera sembrado, ellos no podrían hacer nada, y era posible que esto causara más caos por causar que los ciudadanos se asustaran con cualquier sombra, por miedo a un ataque de dragones antiguos… claramente, nadie sería capaz de entrar al área y demandar que los dragones antiguos se mostraran. además, mile le había pedido a kragon que se apareciera por el sitio de vez en cuando, como un servicio especial. aunque no hiciera nada al venir, unos cuantos avistamientos serían suficientes para establecer un registro creíble sobre dragones antiguos estando presentes en el área. para los dragones antiguos, la distancia entre la aldea de kragon y el sitio era casi la misma distancia que un japonés  citadino teniendo que viajar desde casa a una tienda de conveniencia local—en otras palabras, estaba cerca. considerando el favor que mile había hecho con su cola, venir aquí una vez al mes no era nada. “¡muy bien, retirada!”. sus asuntos aquí habían oficialmente terminado… al igual que sus asuntos en el imperio en general. su plan ahora era regresar a casa. pero primero, continuarían por la costa, según el plan, acumularían algunos productos costeros, y viajarían siguiendo la cosa hacia el norte, de regreso al reino de tils. pacto carmesí se despidió de los demi-humanos y partió junto a los comerciantes una vez más… ***  “gracias por todo”. la caravana regresó al reino de tils sin incidentes. ahí, pacto carmesí recibió sinceros agradecimientos de los comerciantes, junto con una cuidadosamente calculada suma por los bienes que los comerciantes le habían pedido prestados a mile, por la comida compartida, y además un gran bonus. todo esto, junto con una a en su reporte de misión completada… aunque no es como si hubieran podido recibir menos que esa calificación. el gremio entregaba el pago por misiones de escolta a cambio del reporte firmado, así que parte de su paga no vendría de los comerciantes en sí. pero en este caso, estaba de más decir que el bonus era mucho mayor a la tarifa original por la misión. en realidad, la misión había sido muy lucrativa para pacto carmesí. “¡hee hee hee, qué grandes ganancias!”, dijo pauline con una sonrisa.  como era de esperarse, cuando mile le hizo su petición a kragon, pauline había hecho la suya propia—con la intención de conseguir escamas, y un fragmento de uno de los talones del dragón. obviamente, kragon no había estado muy feliz de esto, pero no pareció tener el valor para negarse. a regañadientes, se quitó varias escamas, y un fragmento de talón. recoger una escama que no había sido mudada naturalmente parecía todo un calvario. y ya que él había rogado porque no le quitaran un talón completo, se habían comprometido con sólo un pequeño trozo. por supuesto, pauline lo había curado después de remover las escamas, y el talón crecería pronto. mile se sentía un poco triste por lo deprimido que se veía kragon luego de que su uña trasera fuera recortada, así que le talló un diseño genial en el talón cortado, lo cual pareció animarlo de nuevo. aparentemente, le gustó su nueva apariencia desde su tiempo como misato, mile siempre había tenido habilidades artísticas, así que con un extra afilado cuchillo creado por las nanomáquinas, este tipo de trabajo detallado era simple. no sería adecuado tallarle al talón de un dragón antiguo un emblema de dragón, o un ogro, o una mantícora. eso sería igual a tatuar a un humano con una imagen de un ratón casero, es decir, para nada adecuado para una fiera criatura como kragon. así que, en lugar de optar por la imagen de una criatura o demonio o dios, ella simplemente le talló un patrón abstracto. además, ya que pauline quitó un pedazo de uña suficientemente grande para una espada o cuchillo, esta era ahora ligeramente más delgada, afilada, y tenía la apariencia de un arma siniestra y amenazante.  mile comenzó a emocionarse con su trabajo cuando kragon le dijo que todos los dragones antiguos tenían un símbolo especial que significaba algo para ellos, y ella talló el símbolo de kragon en el reverso de su garra frontal.    “de esta forma”, explicó, “si golpeas a alguien en la frente, tu símbolo quedará marcado ahí, y jamás olvidarán tu poder o lo imponente que eres mientras vivan… asumiendo que no uses demasiada fuera al golpearlos. además, cada que visites una aldea humana o demi-humana, puedes marcar tu garra en alguna pared o árbol grande, y tu nombre será pasado por generaciones”. con esto, kragon se sintió extremadamente feliz y le agradeció a mile antes de partir a seguir con su vida. en realidad, mile había pensado en esto para crear un incentivo para que kragon contuviera su fuerza, haciendo que sólo dejara su marca en cualquiera con quien peleara, en lugar de matarlo. “bueno, yo creo que hoy fue un día productivo…”. mile estaba muy satisfecha. “¡hee hee! ¡este pedazo de uña es suficiente hasta para unas cuantas espadas! nunca he escuchado de una espada hecha con el talón de un dragón antiguo. me pregunto cómo ponerle precio…”. por su parte, pauline estaba igual de feliz. claro, había ocasiones donde los dragones antiguos les daban escamas que habían mudado a los humanos como gracias o disculpa, pero nadie jamás había escuchado de uno quitándose y regalando un talón. lo cual significaba que era imposible que alguien pusiera sus manos en tal objeto sin localizar y profanar la tumba de un dragón antiguo—un crimen que ciertamente no causaría que sólo el criminal, sino quizás el país completo, fuera aniquilado. “por supuesto, cuando se remueven del cuerpo de un dragón antiguo, pierden un poco de potencia, pero siguen igual de ligeras y fuertes. además, nadie lo usaría como un objeto para el día a día. cualquier cosa hecha de este material sería  guardada en el palacio como tesoro nacional, o usado para ritos en los templos”, dijo mavis. “cierto. nadie sería tan estúpido como para usar un arma así en batalla real”, aceptó reina. “sería como usar una espada forjada de oro puro”. ella tenía razón. una espada de oro puro sería cara, pesada, y demasiado suave—tanto así que probablemente se torcería luego de un solo golpe. ya que sería demasiado suave, no se rompería, necesariamente, pero el oro no era material que uno querría usar para su espada. el talón de un dragón antiguo, por supuesto, era mucho más fuerte, y probablemente podría aguantar uso práctico, pero, aun así, nadie usaría algo tan caro como parte de su equipo estándar. eso, sin embargo, no era suficiente para disminuir el valor de tal objeto. el simple hecho de ser una espada hecha con el talón de un dragón antiguo la convertiría en un gran tesoro. de hecho, su alto precio sería otra razón por la que algo así no sería usado en el día a día. “probablemente debamos venderlo fuera del imperio. ellos tienen demasiada historia—o al menos, demasiado miedo de— los dragones antiguos. ¿quién sabe qué harían si ven un objeto como este?”, dijo pauline. las otras tres asintieron. y así, el talón-espada de pauline se volvió algo que estarían guardando durante un tiempo. procesar el talón y crear espadas con él era algo que mile podía hacer durante su tiempo libre de los próximos varios meses. después de todo, causaría un gran alboroto si llevaban un material así al herrero, y sería problemático para el herrero mismo que le pidieran trabajar algo aparte del metal. ***  durante un tiempo después de eso, pacto carmesí vivió una vida normal—o al menos, normal para ellas—hasta que, un día… “pacto carmesí, hay una carta para ustedes del correo gremial”, anunció la trabajadora, entregándoles un sobre. “dice que es… esperen, ¿y esta cresta tan rara?”. “¿cresta?”. por lo general, si el remitente de la carta usaba una cresta, era un noble o parte de la realeza. mavis, familiar con tales temas, vio con prisa la carta en manos de reina y frunció el ceño. “hm, no es el sello de ninguna casa noble. no tienen ninguno de los elementos típicos ni sigue ningún estándar para blasones…”. pauline acercó su cabeza para ver también. “pero, creo que lo he visto antes”. después de pensarlo un rato, mile dijo: “¡oh! ¡ese es el que yo tallé!”. “¿eh?”. ciertamente, era la marca de kragon, la que ella le había tallado en el talón. obviamente, la escala era completamente diferente, así que esta cresta no podía haber sido hecha con el talón mismo, pero tenían la misma imagen. “como lo tallé al revés, no lo reconocí al principio!”, rio mile. “me sorprende pensar que él puede sostener una pluma con sus enormes patas. debe ser bastante hábil…”. “¡es obvio que hizo que un demi-humano o alguien así escribiera! además, ¡eso no es lo importante! ¡lo que importa es el contenido de la carta!”, gritó reina.  las otras tres asintieron. “cierto”. de repente, notaron que la trabajadora que les había entregado la carta—al igual que virtualmente todo empleado y cazador en el edificio—estaba mirándolas, orejas paradas. “………”. rápidamente, pacto carmesí se retiró.   capítulo 91: una convocatoria “¿convocatoria?”, preguntó pauline. desde el gremio, las cuatro se apresuraron a su habitación en la posada para abrir la carta. dentro, encontraron… “bueno, yo diría que es algo así como eso de ‘las espero detrás del gimnasio luego de la escuela’”, dijo mile. “¿qué significa eso? ¿y qué es eso de ‘gimnasio’?”. reina dejó caer sus hombros. siempre que no entendía una referencia de mile, ella lo atribuía a un defecto suyo. mavis, por otro lado, lo ignoraba como siempre. “es una convocatoria de los dragones antiguos”, aclaró mile. “o vamos nosotras, o ellos vienen”. claramente era una amenaza, pero mile no parecía haberse dado cuenta. las otras guardaron silencio. “parece que kragon es solo el intermediario”, prosiguió mile. “es otro dragón el que tiene asuntos pendientes con nosotras”. reina se hundió de hombros con cansancio. “esto es malo, ¿no? dudo que nos contactaran si no fuera algo malo, y si tienen alguna actualización o anuncio, lo escribirían directamente en la carta. además, si fuera un asunto pequeño, el dragón vendría, o enviaría algún mensajero hombre bestia para que nos lo encontráramos en el bosque o las montañas. el hecho de que tenemos que irnos a ver con un dragón significa que es algo serio”. “es como eso de ‘¡hermano mayor, fueron esos sujetos!’, ¿verdad?”, preguntó mavis, haciendo una mueca.  basándose en sus interacciones con kragon, él no parecía ser así, pero no cabía duda de que alguien mayor en rango que él esperaba encontrarse con pacto carmesí para tratar un asunto no tan bonito. “si nos rehusamos, una pandilla de dragones antiguos vendrá a la capital, y ese sería un serio problema”. “¡eso sería lo peor!”. “se convertiría en la gran guerra humano-dragón…”. de hecho, la gran guerra humano-dragón era un cuento de hadas que describía una guerra entre humanoides y dragones. sin embargo, no era más que un trabajo de ficción, y no algo que hubiera ocurrido en el pasado. como curiosidad, era un cuento de hadas que llevaba mucho tiempo de existir—y al menos esta vez, no tenía nada que ver con miami satodele. “será mejor ir”. “supongo que no queda de otra”. “no tenemos muchas opciones”. “¡adelante, pegasus!”. ¿quién demonios es pegasus? ciertamente, a pacto carmesí no le quedaba otra opción. sin importar qué tan poco quisieran ir. sin importar cuánto quisieran ignorar la carta. sin importar cuánto quisieran escapar. imaginen si los dragones antiguos, enfadados por ser ignorados, vinieran a la capital real de tils… siempre y cuando hubiera otra opción, la elegirían. así debe haberse sentido aquel comerciante, galadle: no tenían otra opción… ***  “en todo caso, ya venimos, de regreso al sur del imperio albarn, a un lugar cerca del mar. ¡nos acercamos a la aldea de los dragones antiguos!”. “¿a quién le estas explicando?”, preguntó reina con cansancio, mientras mile orgullosamente narraba su locación— un hecho del que todas estaban al tanto. “¿por qué tuvimos que venir hasta aquí?”, gruñó pauline. “los dragones antiguos viajan esta distancia como si nada, así que probablemente no tienen el concepto de cuánto tiempo y energía les consume a otras criaturas”, respondió mavis. “supongo que tienes razón. y creo que sería un problema si se hubieran aparecido cerca de la capital…”. en todo caso, pacto carmesí estaba de nuevo en el imperio albarniano, acercándose a la aldea de los dragones antiguos.   “sólo nos dijeron que viniéramos cerca de esta área, pero no tenemos un sitio en concreto, y ellos no nos dieron una fecha u hora… los dragones antiguos son enormes, así que deben ser fáciles de ver, pero probablemente envíen algún hombre bestia como punto de contacto, así que encontrar a esos va a ser—”. “¡ahí! ¡justo ahí!”, gritó mile, interrumpiendo a reina. como siempre. “¿ustedes son pacto carmesí?”, preguntó un solitario hombre bestia, acercándose a las cuatro cazadoras. parecía haber estado esperando aquí durante días, ya que había una tienda de campaña cerca. “¿kragon te envió?”. “correcto. ahora, ¿podrían ver hacia el cielo y disparar tres fireballs?”.  “¿acaso no se les ocurre una forma para que ustedes sean los que envíen la señal?”, preguntó pacto carmesí, sorprendido de volver a encontrarse en esta posición. “la mayoría de gente bestia no puede usar magia. ¡¿qué esperan que hagamos?! ¿van a esperar hasta que reúna un montón de fajina, madera y arbustos para empezar una señal de fuego? ¿eh?”. “disculpa. permítenos lanzar las fireballs…”. mile lanzó tres fireballs hacia el cielo, y poco tiempo después, un grupo de dragones antiguos apareció—nueve, para ser exactos. “¡whoa, vino toda la pandilla!”. “¡son demasiados!”. si tantas personas—digo, dragones—venían, entonces claramente fue algo bueno que pacto carmesí hubiera venido en lugar de esperar a que los dragones fueran a tils. que tantos dragones antiguos aparecieran cerca de un asentamiento humano sería suficiente para que todo el continente entrara en pánico. todas las naciones del mundo probablemente empezarían a reunir sus fuerzas y anunciarían un estado de emergencia…   thwoom, thwoom, thwoom. uno por uno, los dragones aterrizaron frente a pacto carmesí. los nueve entonces se separaron en tres grupos de seis, dos y uno. uno de los integrantes del grupo de dos se puso frente a pacto carmesí y comenzó a hablar. “ha pasado un tiempo, pacto carmesí…”  ¡¿líder supremo dessler2?! incluso en momentos así, mile actuaba como siempre. “pero si te vimos hace poco, kragon…”. “¡¡soy berdetice!!”. “sé que no pueden distinguirme, pero yo soy kragon…”, dijo el otro dragón del grupo de dos. “¡si ya saben que no podemos distinguirlos, digan sus nombres desde el inicio!”, dijo enojada reina. el par de dragones se veía molesto, pero no podían hacer nada al respecto. “¿y esos otros de allá son…?”. a causa de la pregunta de mile, el par finalmente recordó su rol aquí. kragon, el mayor del par y el que había enviado la carta, presentó al resto. “frente a ustedes está nuestro líder, lord laylen. los otros seis son nuestro escuadrón de guerreros de élite”. “¡oh, el grupo del que solías formar parte!”. “¡no mencionen eso!”. aparentemente, seguía siendo un tema delicado para él. las otras tres miembros de pacto carmesí suspiraron, sorprendidas como siempre de la falta de conciencia social de mile. eso no es algo que deberías estar mencionando… “em… ¿puedo preguntar algo?”, dijo mile de repente. “¿qué pasa?”, respondió kragon, haciendo un ademán amable para que ella prosiguiera. francamente, mile preguntó lo que había estado pensando.   2 probablemente una referencia a uchuu senkan yamato  “emm, si nos vamos a enfrentar, ¿los guerreros no deberían estar protegiendo a su líder?”. el grupo de seis guardó silencio. las caras de kragon y berdetice se sobresaltaron con sorpresa. los seis guerreros se congelaron en su sitio. luego, ocho cabezas de dragón viraron lentamente hacia el líder, casi con un audible crujido. él estaba enojado. el líder estaba furioso. mile prácticamente le había dicho al líder: “están a punto de ser atacados por un grupo de niñas humanas, así que probablemente deberías hacer que tus guardias te protejan”. de hecho, eso era exactamente lo que mile le había dicho. esas no eran el tipo de palabras que un orgulloso y joven dragón antiguo podría soportar… “¿q-q-q-q-qué—?” oh, no… ella lo había arruinado todo. las otras tres miembros de pacto carmesí estaban muy conscientes del error de mile. las caras de los otros ocho dragones antiguos se sobresaltaron también… o al menos, así pareció. era difícil que un humano entendiera las expresiones de los dragones antiguos. “cr-cr-cr…”. ¿y ese sonido? parece una gallina. ahora que lo pienso, he escuchado que las gallinas vienen de los dinosaurios… “¡¡¡cretinas!!!”. ah.  las otras tres miembros de pacto carmesí bajaron sus cabezas. esto ya no tenía salvación. su conversación se había roto desde el inicio. afortunadamente, era hora de que alguien mayor, con mucha más experiencia, hiciera su debut. “gran líder, sonreír ante tales insensatas palabras de formas de vida inferiores nos representará una ventaja”. “hm… supongo que tienes razón”. el líder pareció reaccionar a este consejo del líder del escuadrón… claramente, era un dragón simple. me pregunto si de verdad es cierto que los dragones antiguos son más listos que los humanos. dudas comenzaron a emerger en las mentes de pacto carmesí. dicho eso, como berdetice había explicado antes, este líder era joven, y poseía las características de la juventud, una de las cuales era tener demasiada confianza en sus habilidades. obviamente, él estaba convencido de que era un inteligente y poderoso dragón antiguo, uno que gobernaría el mundo y guiaría a los necios que yacían en él—pero quizás esta era más una condición individual. en especial porque ya no era un adolescente, pero seguía comportándose de una manera demasiado juvenil… calmado una vez más, el líder volvió a hablar. “ahora, vayamos al grano. por haberse atrevido en repetidas ocasiones a oponerse a nosotros, los dragones antiguos, ustedes serán sentenciadas a la muerte”. claramente, si íbamos a llegar a esto, no hubo punto en haberlo calmado.   oigan, nanos. ¿hasta los cuántos pies de altura es que existen ustedes?  notando que la situación ya no tenía salvación, mile comenzó una conversación encubierta con las nanomáquinas. ya que, en su vida pasada, su padre había trabajado en el campo de la aviación, mile (o mejor dicho, misato) estaba acostumbrada a referirse a las alturas en pies, y no en metros. no tiene sentido existir en sitios donde no hay criaturas vivientes a las cuales responder. por lo tanto, no existimos en zonas más altas que aquellas donde vuelan las aves y los wyverns. ¿pero pueden ir más arriba? ¡sí, por supuesto! con sus órdenes, señorita mile, y su autorización de nivel 5, podemos despachar un equipo aeronautico temporal fuera de nuestra area de servicio establecida. además, ya que se trata de usted, aunque salgamos del área desde donde podemos ser alcanzados directamente por sus pulsos mentales, podemos mantener sus últimas ordenes. por supuesto, las unidades cercanas pueden transmitir otras instrucciones a las unidades que ya mantienen sus órdenes, y… eso quiere decir que puedo enviarles órdenes condicionales a nanomáquinas que se encuentren a decenas de miles de pies en el aire… correcto. bien, en ese caso, ¡las que tengan tiempo, que vayan para arriba! con esas palabras, bastantes nanomáquinas aceleraron hacia el cielo. hasta el infinito, y más allá…  “¡no los entiendo en lo absoluto! ¡primero el dragón wence viene, luego kragon y compañía nos atacan, y aun así los ayudamos a engañar al imperio para detener una guerra entre ellos y los demi-humanos! ¡ustedes son los que deberían estar agradeciéndonos! ¿por qué tendrían que matarnos? ¡no tiene sentido!”, argumentó reina, indignada, y con las otras tres asintiendo. sin embargo, al líder de los dragones antiguos no pareció importarle nada de lo que dijera pacto carmesí. “¡¿acaso no tienen sentido común?! ¡deben enfrentar las consecuencias de sus acciones, consecuencias de escupirle en la cara a los grandes y poderosos dragones antiguos! ¿o es que acaso ustedes no aplastarían a un mosquito o mosca que volara frente a sus caras?”. “………”. ¿mosquito o mosca? si así es como los dragones las veían, no podía hacerse nada más. berdetice y kragon parecían considerar a los humanos formas de vida inferiores e indefensas, mientras que la joven chica dragón, shelala, parecía considerarlos al mismo nivel que unos gatitos. este líder, sin embargo, los consideraba como nada menos que insectos molestos. claramente, no tendría caso tratar de razonar con él. después de todo, él no había venido a dialogar. él había venido en busca de la satisfacción de ver a pacto carmesí retorciéndose de miedo al sentenciarlas a la muerte. él las había hecho venir porque sería imprudente que tantos dragones aparecieran cerca de un asentamiento humano, y porque sería molesto viajar hasta allá. todo iba de acuerdo a lo que él había decidido. por supuesto, pacto carmesí había anticipado estos sucesos. kragon incluso las había advertido de la posibilidad de que esto  pasara. así que, obviamente, ellas no habían venido de improvisto. magia de calor ultra-super deluxe activada… crimson inferno, ¡full power! arde, corazón mío, estremécete, espíritu… en el nombre de mile, y en el mío propio, yo, mavis, ¡te ordeno! ¡¡¡querida espada mía, muestra tu forma original!!! mavis apretó entre sus manos las micros en su bolsillo. en nombre de kurihara misato, adele von ascham, y mile, yo les ordeno… ¡nanomáquinas! ¡je vous commande! aceite, espesante, aire comprimido… ¡blazing firebomb, preparada! mientras reina hacía su protesta, las demás comenzaron a preparar sus ataques en silencio. una vez ella terminó, se unió a las preparaciones también. “¡gran líder, por favor espere un momento! ¡lastimar a criaturas indefensas sin una razón va en contra de las enseñanzas de nuestros antepasados!”. “¡ellas solo han vivido unos cuantos años—son infantes! ¡tenga piedad!”. berdetice y kragon trataron de detenerlo, pero el líder no tenía intención de escuchar. ningún consejo o regaño funcionaría con él. “¡silencio! ¡ahora, arrodíllense y rueguen por sus vivas— aunque no tengo la intención de perdonarlas!”. pacto carmesí se resignó a lo que tenían que hacer. los dragones podían hablar la lengua humana, pero era imposible hablar con este. a pesar de la completa derrota de berdetice y kragon a manos de pacto carmesí, ambos dragones les habían mostrado  amabilidad después. sin embargo, algo les decía que esos dos simplemente estaban más inclinados a ser compasivos con formas de vida inferiores. así como un humano abraza a un perro o gato que los salvó de algún aprieto… ahora, berdetice y kragon parecían resignados. los seis guerreros parecían confundidos también, pero ninguno estaba listo para arriesgar su posición al regañar a su líder por el bien de cuatro criaturas inferiores. aunque berdetice y kragon se quedaran fuera de la pelea, según su trato con pacto carmesí—e incluso si el líder sólo se quedaba viendo desde la orilla, tendrían que luchar contra seis dragones antiguos guerreros. y, a diferencia de la batalla uno- por-uno de la última vez, aquí probablemente los seis atacarían al mismo tiempo… esto es inútil. las otras cuatro se dieron miradas, en silencio aceptando abandonar todo esfuerzo de resolver esto pacíficamente. todo lo que restaba era… “santo cielo, qué mocoso tan ignorante. ¡demasiado mimado por los adultos!”. “no puedo ni sentir envidia por su trabajo, queridos niñeros. puedo imaginarme cómo se sienten…”. “supongo que hasta entre los dragones antiguos hay tontos…”. “¿deberíamos cortarle la cola también?”. “¡eee!”. con la amenaza de mavis, cierto dragón abrazó por instinto su propia cola. si no se podía evitar una batalla, era ventajoso enojar al oponente. aunque no pudieran enfadar a los combatientes  reales, podría ayudar al menos un poco que su comandante perdiera toda capacidad racional de toma de decisiones. “¿qué…? ¡¡¡m-mátenlas!!!”. los seis guerreros dragón de inmediato dieron pasos pesados hacia pacto carmesí. “perfecto. el líder acaba de ordenar nuestras muertes, y seis de sus guerreros vienen hacia nosotras. ¡yo diría que ya estamos en terreno de legítima defensa!”. ciertamente, justo como mile estaba implicando—aunque mataran al joven líder, podían defenderse usando la legítima defensa, significando que el resto de los dragones probablemente no le podían declarar la guerra a la humanidad como represalia. los dragones antiguos, después de todo, eran sabios y compasivos—excepto por los jóvenes poseídos por la firme creencia de la supremacía de los dragones antiguos, claro está. si reflexionaban sobre cómo habían fallado en educar y guiar a su líder “amado por los espíritus de la magia”, quedaría claro que los dragones antiguos tuvieron toda la culpa, y no los humanos, quienes simplemente habían reaccionado al ataque. sin duda, pacto carmesí esperaba que incluso les dieran unas escamas como disculpa—aunque ese era el tipo de cosa que sólo pasa una vez en varias décadas, o siglos. y así… “¡denles con todo!”, anunció mile. sin siquiera una palabra de respuesta, reina y pauline dispararon los hechizos completados que habían estado guardando. mavis sacó las micros de su bolsillo y las tragó. para evitar estar tragando capsulas una por una, esta vez le habían dado un vial especialmente grande, conteniendo el triple de micros de lo usual. la botella era de color rojo, un indicativo de riesgo… después de todo, el triple de la dosis normal era algo serio.  de hecho, mile había dudado mucho cuando mavis le pidió una dosis tan grande, pero no pudo refutar el punto de mavis sobre que “no tiene caso que muera sólo por evitar dañar mi cuerpo, ¿verdad?”. además, si ella maniobraba su ahora artificial brazo izquierdo para reducir la carga en el resto de su cuerpo, podría estar bien, más o menos. sólo por esto fue que mile estuvo apenas de acuerdo con aceptar su petición. “¡blazing firebomb, fuego!”. “¡crimson inferno!”. “¡¡¡ex true godspeed blade, tercera forma, ‘guillotina de dragones’!!!”. “¡phaser beam, fuego!”.   ¡ka-shoom! ¡bwooow! ¡ka-slash! ¡pew! ¡pew! ¡pew!   y así, comenzó la gran guerra humano-dragón…   historia extra: ¿qué llevarías a una isla desierta? “oigan chicas, si fueran arrastradas a una isla desierta ustedes solas, y solo pudieran llevar algo con ustedes, ¿qué sería?”. “y aquí vamos de nuevo con las tonterías repentinas…”. como siempre, mile hizo una indescifrable pregunta de repente. y como siempre, reina y las demás le siguieron el juego. a decir verdad, mile a veces preguntaba cosas así específicamente como referencia para los libros que en secreto escribía bajo un seudónimo. su conocimiento de su vida pasada, junto con las tantas novelas que había leído, hacía casi imposible que creara historias plausibles por cuenta propia. y por eso… “¡una espada!”. ¿qué otra respuesta esperaban de mavis? una espada era la elección obvia para una espadachina, pero reina y pauline eran magas, y en realidad no necesitaban sus báculos para conjurar. los báculos no eran más que un arma para golpear monstruos cercanos o enemigos que pelearan cuerpo-a-cuerpo. si querían un báculo, podían cortar la rama de algún árbol en la isla y hacer uno. por eso, mile se preguntaba qué cosas escogerían ellas dos… “¡un bote!”. “¡bzzt! ¡bzzt! ¡pauline!”. mile sacudió sus manos frente a su pecho con exasperación. este ademán y frase eran unos que mile usaba tan a menudo que todas habían llegado a comprender que significaba algo parecido a “eso no se vale, vuelve a intentarlo.  “¡el reino de balmore!”. “¡bzzt! ¡bzzt! ¡reina! si te llevas un país completo, estamos hablando de cientos de miles de personas— ¡millones incluso! ¡así ya no sería una isla desierta! ¡ya no sería supervivencia, solo vivencia normal, y podrías comprar lo que quisieras en la ciudad!”. antes de reencarnar, mile había leído novelas donde el protagonista reencarnaba en un mundo de fantasía. en algunos de esos libros, los protagonistas podían hacer lo que quisieran desde un principio, sin importar si sólo podían llevarse una cosa consigo tras reencarnar. a veces, incluso reencarnaban con un crucero pesado intergaláctico, controlado por computadoras humanoides—lo cual, por supuesto, incluía androides con forma de chicas lindas para que fueran las terminales de navegación del protagonista. “que pesadas son las noches. ¡oh, cállate! ¡las mañanas y las tardes también son pesadas!”. las otras tres miraron sin decir una palabra mientras mile continuaba su rutina de una sola persona. justo entonces… “¡oh, ya sé!”, dijo mavis, golpeando su frente con un gesto de ‘cómo no se me ocurrió antes’. “hay una cosa que podrías llevar, y así jamás querrías nada más…”. “¿eh?”, preguntaron reina y pauline, mientras mile veía a mavis, intrigada. “¿qué cosa?”. “¡mile!”, respondió mavis. “¿eh?”. “tú, mile. si te tuviera, no tendría que preocuparme por la comida. si mi espada se rompe, podrías arreglarla, si me aburro,  podrías contarme cuentos. sabes muchas historias y juegos, y ni siquiera tendría que preocuparme por dragones que aparecieran de repente. ¡es perfecto! todo hogar necesita una mile. con las preparaciones correctas, ella no causará problemas, y es compacta, así que no será difícil encontrar donde meterla, y es ligera y fácil de cargar”, explicó mavis. “¡cierto!”. reina y pauline estuvieron de acuerdo de inmediato. era una idea brillante. sin embargo… “¡gaaah! les dije que llegarían a la isla ustedes solas. ¡solas! además, ¡¿¡¿no me están tratando como una ‘cosa’ que pueden llevar a donde sea?!?!”. “bueno, quiero decir, siempre pensamos en lo ridículamente útil que eres…”. “¡cállate!”. mile estaba enfadada.   un mes después… “oh, ogian, miami satodele sacó un nuevo libro… ajá, ajá… ¿mi vida en una isla desierta junto a una hechicera todopoderosa?”. mile había adoptado esa trama sin problemas.   palabras finales tiempo sin verlos. ¡funa aquí! ¡por fin llegamos al volumen 12 de abipro! ¡exacto, la abreviación oficial de la serie no es “heikinchi” (promedio), sino “noukin” (abipro)! buscar “heikinchi” tira demasiados resultados no relacionados, y ese es un problema de márquetin, en especial para el anime.   a: “¿qué hacemos con los niveles de voz aquí?”. b: “¿eh? ¿hablas de los de ‘promedio’?”. a: “oh, los promediamos entonces. ¡entendido!”. b: “¿eh? ¿qué demonios fue eso…?”.  mile: “¡esas son imaginaciones tuyas!”. reina: “¡eso es falso!”.  protegiendo comerciantes falsos, pacto carmesí entró a las tierras enemigas del imperio. ¡como siempre, se vieron envueltas en caos, y, de nuevo, enfrentaron a esos enemigos de siempre! ¡una aterradora nueva batalla da inicio! una batalla que decidirá el destino del mundo…   mavis: “oigan, las nanos en el manga se parecen a wapuro de agedama, ¿no creen?”. reina: “de nuevo dices cosas que nadie más entiende…”. pauline: “o como el padre de space family carlvinson…”. reina: “¡no! ¡no se parecen!”.    el anime comenzará pronto, y será transmitido por todo el país— ¡y el mundo! ¡por favor vean los primeros episodios! luego, ya pueden decidir si verlo hasta el final o no. ¡por favor esperen con ansias el cuarto volumen de la adaptación a manga y el primer volumen del manga spin-off! el quinto volumen de saving 80,000 gold in another world for my retirement y de i shall survive using potions!, las otras dos series de mi trinidad de colegialas pecho-plano, también salieron hace poco, seguidos de los quintos volúmenes de sus versiones manga poco después. ¡gracias por dejarme hablar de la serialización continua de estas otras series de funa durante el anuncio del anime de abipro! ¡no me rendiré hasta que mis otros trabajos sean animados! sí… estoy un paso más cerca de mis sueños…   ah, cierto, eso me recuerda—ahora hay artículos de wikipedia para funa y didn’t i say to make my abilities average in the next life?! comparado con los detalles del articulo de didn’t i say to make mi abilities average in the next life?!, la página sobre funa está vacía… ahora, necesitamos artículos para las otras dos series. digo—no es que les esté demandando que los hagan o algo así… finalmente, al editor en jefe; a itsuki akata, el ilustrador; a yoichi yamakami, el diseñador de portada; a todos los envueltos en la corrección, edición, impresión, embalaje, distribución, y venta de este libro; a todos los críticos de let’s be novelists que me dieron sus impresiones, guía, sugerencias y consejos; y principalmente, a todos los que llevaron estas historias a sus hogares, gracias desde el fondo de mi corazón.  nos encontraremos de nuevo en el próximo volumen. sólo tienen que creer… —funa. fin de la novela.

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